Resistir, luchar, avanzar
Resistir, lluitar, avançar
Resistir, loitar, avanzar
Resistir, lluchar, avanzar
Eutsi, borrokatu, aurrera egin

Información sobre el Congreso

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PROGRAMA DEL CONGRESO

(Actualizado el martes 8 de mayo a las 8:40 h)

 

Reglamento del proceso congresual

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1. Lugar y fecha. El X Congreso Ordinario de la Confederación Intersindical tendrá lugar en La Cala de Mijas (Málaga), durante los días 11, 12 y 13 de mayo de 2012.

2. Lema. El lema del Congreso será: Resistir, luchar, AVANZAR.

3. Calendario. Es el siguiente:

19-20 de octubre de 2011: reunión extraordinaria del SC. Aprobación de las Ponencias. Excepto el Informe del Secretariado.
26 de octubre: remisión de Ponencias a las distintas organizaciones territoriales. Comienza el plazo de enmiendas de la primera vuelta. Las enmiendas serán enviadas, por correo electrónico, a la persona responsable de Organización Confederal.
15 de diciembre: Fin del plazo de enmiendas en primera vuelta.
21 y 22 de diciembre: reunión del Secretariado Confederal que decidirá sobre los contenidos del "Informe del Secretariado al Congreso" y las personas encargadas de redactarlo.
2 de enero de 2012: remisión a las organizaciones territoriales y a ponentes del conjunto de las enmiendas recibidas. Comienza el plazo de discusión de la segunda vuelta: propuestas de transaccionales y retirada de enmiendas; no es posible incluir enmiendas nuevas.
13 de febrero: fin del plazo de la segunda vuelta. Remisión a Organización de informes de territorios y/o ponentes con enmiendas retiradas y transaccionales propuestas, si las hubiere.
20 de febrero: remisión desde Organización del material debidamente ordenado a Publicaciones.
Secretariado Confederal de marzo (sin fecha por ahora): aprobación del Informe al Congreso. Remisión del mismo al día siguiente a Publicaciones.
20 de abril: envío a territorios de la publicación oficial de los documentos congresuales: Informe, Reglamento, Ponencias y Enmiendas definitivas.


4. Comisión Técnica del Congreso. El Pleno Confederal, a propuesta del Secretariado, constituirá la Comisión Técnica del Congreso, formada por la actual CC de la Confederación más las personas propuestas por el sindicato en cuyo territorio se celebre el Congreso. Esta Comisión se encargará de la gestión concreta de cuantas tareas logísticas se estimen necesarias para la correcta organización del Congreso, y en su momento se adscribirá a la Mesa del mismo a los efectos del control de credenciales y de cuantas otras tareas decida la Mesa del Congreso. Las personas ntegrantes de la Comisión Técnica no tendrán la consideración de miembros de la Mesa del Congreso.

5. Composición del Pleno Congresual. Al congreso asistirán como personas delegadas de pleno derecho, con voz y con voto, las componentes de las delegaciones territoriales, cuyo número dependerá de la afiliación declarada. También asistirán, como personas delegadas de pleno derecho, las integrantes del Secretariado Confederal.

5.1. Representación territorial: Cada organización territorial confederada elegirá su representación según el criterio de una persona delegada por cada 200 afiliadas o fracción. En los territorios donde todavía coexistan dos organizaciones pertenecientes a la Confederación, como permite la disposición transitoria segunda de los Estatutos vigentes, las delegaciones territoriales responderán al número de afiliados y afiliadas que sumen entre ambas organizaciones, repartiendo la delegación de forma proporcional a la afiliación entre ellas, asegurando que, al menos, haya una persona en representación de cada organización.

5.2. Comisión de coordinación: Las y los miembros de la Comisión de Coordinación de la Confederación Intersindical participarán en el Congreso con voz pero sin voto, siempre y cuando no sean miembros de las delegaciones de sus sindicatos de origen.

5.3. Observadores y observadoras: Con voz, pero no con voto, podrán participar todas las personas afiliadas que los diferentes sindicatos territoriales deseen. Los gastos que generen no serán asumidos por la Confederación.

6. Constitución. El Congreso quedará válidamente constituido en primera convocatoria si están presentes, al menos, cuatro quintas partes de sus delegadas y delegados, o en segunda convocatoria, media hora más tarde, si lo están dos tercios.
En cualquiera de los dos casos, deberá haber presencia de personas pertenecientes a tres cuartas partes de las delegaciones territoriales, al menos.

7. Funciones del Secretariado Confederal. En el Congreso tendrá las siguientes: proceder a la apertura del Congreso, dar lectura al Informe, presentar el Reglamento al Pleno del Congreso y someterlo a votación global para su ratificación, y hacer una propuesta de Mesa del Congreso. Elegida la Mesa del Congreso el Secretariado Confederal cesará en todas sus funciones.

8. Mesa del Congreso. Tiene como función dirigir los debates, moderar la marcha del proceso congresual, someter a votación los temas por decidir y levantar acta de las decisiones tomadas. La Mesa representa a la Confederación durante el Congreso.
La Mesa del Congreso deberá ser ratificada por mayoría de dos tercios del Congreso. Podrá ser revocada a propuesta de un tercio de los congresistas y las congresistas, si así lo decide el Pleno por mayoría absoluta. En la Mesa deberán estar representados todos los sindicatos de la Confederación, procurando que en ella estén representados todos los sectores. Será paritaria en su distribución por sexos.
La Mesa distribuirá en su seno las responsabilidades necesarias para garantizar la buena marcha del Congreso, eligiendo dos personas, al menos, que ostentarán la Portavocía y la Presidencia del Congreso, y dos personas, al menos, para la Secretaría del mismo. Las decisiones de la Mesa son inapelables.

9. Funcionamiento. El Congreso funcionará en pleno, considerándose válidas sus decisiones siempre y cuando el número de personas delegadas presentes en cada votación no baje de dos tercios total de acreditadas.
El Congreso podrá organizarse en comisiones para la presentación de propuestas, la elaboración de conclusiones y de documentos de trabajo.
Los documentos congresuales serán presentados y defendidos por las personas que participaron en la elaboración de los mismos y que la Comisión Preparatoria designe a tal efecto. Para cada ponencia o propuesta se presentarán las enmiendas o aportaciones que hayan llegado en plazo o que la Mesa estime. Se establecerá un turno cerrado, en cada una de ellas, a favor y en contra, con la duración que marque la Mesa y posterior votación.
En cada votación, las decisiones serán adoptadas por mayoría absoluta de las personas delegadas presentes, en primera vuelta. En segunda vuelta, las decisiones se tomarán por mayoría simple, tras un nuevo turno de intervenciones.
Después de votadas las distintas enmiendas a un documento, se procederá a votar globalmente el conjunto de la ponencia.
La candidatura del Secretariado Confederal será presentada al Pleno congresual por la Mesa para su ratificación, a propuesta de las distintas organizaciones que componen la Confederación.
Las candidaturas para la Comisión de Garantías serán presentadas al Pleno Congresual por la Mesa, que habrá establecido la forma en que han de llegar a ella las propuestas. Para ser válida la elección, las personas que compongan la nueva Comisión de Garantías deberán contar con tres cuartos de votos favorables.
La Mesa elevará a públicos los acuerdos congresuales. Designará a una persona para ello y para registrar los nuevos estatutos en la oficina pública correspondiente.

10. Documentos. Serán los siguientes:

- Ponencia de Política Sindical
- Ponencia de Organización, Estatutos y Carta Financiera
- Ponencia de Trabajo Internacional
- Informe del SC

11. Resoluciones. La Mesa constituirá en su seno la Comisión de Resoluciones, que tendrá el cometido de recoger las resoluciones presentadas según lo establecido en el presente Reglamento y las transmitirá a la Mesa.
Las Resoluciones que tengan que ver con las líneas generales de Acción Sindical o Sociopolítica, han de ser presentadas antes del 13 de febrero (fin de la segunda vuelta de discusión de enmiendas) y serán incluidas en los documentos congresuales. El resto de resoluciones se presentarán durante el Congreso, en el plazo que marque la Mesa.
Las Resoluciones sólo serán admitidas a trámite si vienen avaladas por un mínimo de cuatro sindicatos confederados.
Tras la presentación de cada Resolución la Mesa permitirá, como máximo y por este orden, una intervención contra la misma y una intervención a favor. Terminados ambos, si los hubiere, se procederá a la votación correspondiente.
Las Resoluciones no son enmendables en ninguna circunstancia, salvo lo estrictamente referido a corrección lingüística o que la Mesa estime lo contrario.

12. Orden del día. La Mesa del Congreso, una vez constituida, decidirá y someterá a la consideración del mismo una propuesta de orden del día. La Mesa tiene, en cualquier caso, competencias para modificar sobre la marcha la organización del tiempo si así lo estima conveniente. La Mesa marcará los plazos para presentar propuestas y resoluciones.
Asimismo fijará la distribución del tiempo y de las sesiones de trabajo del Congreso.

Ponencia de Estatutos

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NOTA: Sobre el texto de los vigentes Estatutos, aprobados en Salamanca, se proponen en rojo modificaciones. El texto completo modificado constituye la Ponencia oficial del X Congreso.

TÍTULO I - DENOMINACIÓN, ÁMBITO TERRITORIAL Y PROFESIONAL Y DOMICILIO.

Artículo 1
Al amparo de la Ley Orgánica 11/1985 de 2 de agosto, de Libertad Sindical, se constituye la Confederación Intersindical, con denominación "Confederación Intersindical", en siglas "INTERSINDICAL".

Artículo 2
El ámbito territorial de actuación será el Estado Español, y su ámbito profesional abarcará a todos los trabajadores y trabajadoras que acepten los Estatutos del sindicato, federación o confederación a través de la cual se vinculan vinculado a la Confederación Intersindical.

Artículo 3
La Confederación está formada por los sindicatos, federaciones y confederaciones que se adhieran, vinculen o integren en la misma, de acuerdo con el procedimiento que se establezca en cada caso por parte del Pleno o del Congreso Confederales, y cualquiera que sea su ámbito funcional. La Confederación podrá asimismo adherirse, vincularse o integrarse en las organizaciones de ámbito más amplio del mundo del trabajo; igualmente podrá formar coaliciones con otras organizaciones sindicales.
La Confederación Intersindical podrá adherirse, vincularse o integrarse en organizaciones de ámbito internacional, por acuerdo del Pleno Confederal.

Artículo 4
La Confederación Intersindical se constituye por tiempo indefinido.

Artículo 5
La Confederación Intersindical establece su sede social en la calle Carretas, 14, 7º E-F, 28012 Madrid, pudiéndose acordar en cualquier momento por los órganos de gobierno el cambio de domicilio o la apertura de otras sedes en cualquier otro lugar de su ámbito territorial, lo que se comunicará a todos los sindicatos, federaciones o confederaciones miembros de la Confederación Intersindical.

TÍTULO II — FINES.

Artículo 6

A. Fines generales de la Confederación.

En los términos establecidos en la legislación vigente, la Confederación Intersindical tiene por objeto la defensa y promoción de los intereses económicos y sociales que le son propios, entre otros: la negociación colectiva, el planteamiento de conflictos colectivos de trabajo, el diálogo social y la participación institucional en los organismos públicos de las administraciones laborales, así como la participación en los órganos consultivos de las administraciones públicas.

B. Son fines propios de la Confederación:
1. La consecución de una sociedad sin clases, una sociedad solidaria basada en una ética y en un modelo de desarrollo humano que elimine toda opresión y jerarquización de cualquier colectivo sobre otro.
2. La lucha de los trabajadores y las trabajadoras hacia esta sociedad implica la defensa de un modelo de Servicios Públicos como garante de los derechos de esta sociedad, al servicio de ella y gestionados eficaz, honesta y democráticamente.
3. Defender los intereses laborales, económicos y sociopolíticos de los trabajadores y trabajadoras y luchar por la mejora de las condiciones de vida y trabajo.
4. Asumir las reivindicaciones de los trabajadores y trabajadoras, siempre que no se opongan a las características y fines de la Confederación Intersindical.
5. Dado el carácter sexista que preside la vida social, los diferentes miembros de la Confederación Intersindical asumirán y potenciarán la defensa de la igualdad real entre mujeres y hombres, fomentando la coeducación como modelo educativo que contribuye a transformar la actual situación de desigualdad que viven las mujeres y combatiendo cualquier discriminación que éstas sufran por razón de sexo.
6. Dado el carácter sexista que preside la vida social, los diferentes miembros de la Confederación Intersindical asumirán y potenciarán la defensa de la igualdad real entre mujeres y hombres, fomentando la coeducación como modelo educativo que contribuye a transformar la actual situación de desigualdad que viven las mujeres y combatiendo cualquier discriminación que éstas sufran por razón de sexo.
7. Luchar por unos servicios públicos adecuados a las distintas realidades culturales, sociales, idiomáticas, nacionales y territoriales del Estado Español, debiendo jugar un papel activo en el desarrollo y normalización de las diferentes lenguas de cada nación, nacionalidad, país o región.
8. Potenciar el uso del software libre tanto en la Confederación como en su uso social, reclamando de las Administraciones Públicas una implicación en este sentido. Trabajar en todos los campos por impedir la existencia de una brecha digital que consagra y amplia las desigualdades.
9. Defender el derecho de autodeterminación de los distintos pueblos del Estado Español. Desde la situación del actual Estado de las Autonomías, luchará por exigir y conseguir el máximo grado de autogobierno y la asunción de competencias exclusivas para todas las nacionalidades y regiones.
10. Promover o adherirse a todos aquellos movimientos sociales y políticos que tengan como meta la consecución de una paz real en el mundo, la lucha contra la degradación de la naturaleza y la defensa de una sociedad laica.
11. Exigir leyes democráticas que garanticen los derechos conquistados por los trabajadores y trabajadoras.
12. Exigir una adecuada formación inicial para los trabajadores y trabajadoras, así como la creación de las condiciones para el ejercicio del derecho a la formación permanente en horario laboral y a cargo de la empresa o la Administración.
13. Conseguir para todas las trabajadoras y trabajadores una situación de salud laboral integral en sus tres facetas: física, psíquica y social, en el desarrollo de sus tareas laborales.

TÍTULO III — CARACTERÍSTICAS.

Artículo 7
La Confederación Intersindical tiene las siguientes características:

UNITARIA: La Confederación Intersindical, fiel al espíritu que animó su propio nacimiento, pretende lograr la unidad de los trabajadores y trabajadoras en el marco de un sindicalismo democrático y asambleario. Para ello, fomentará la representación unitaria y directa de los trabajadores y trabajadoras surgida de las asambleas y centros de trabajo.
Podrán estar afiliados a esta Confederación todos los trabajadores y trabajadoras de los distintos países, nacionalidades y regiones, a través de sus sindicatos, federaciones y confederaciones respectivas, sin discriminación alguna en función de sus opciones políticas, religiosas o cualesquiera otras.
Conscientes del papel preferente de los propios trabajadores y trabajadoras en la construcción de la unidad, fomentará la representación unitaria y directa de los trabajadores y trabajadoras surgida de las asambleas y centros de trabajo.

Con el mismo fin, la Confederación Intersindical prestará atención preferente y continuada al logro de acuerdos concretos y formas de unidad de acción con el resto de los sindicatos que permitan avanzar en la superación de las divergencias existentes, y formas de unidad cada vez más amplias, en aras de la unidad sindical.
Si el trabajo unitario continuado de la Confederación con otras organizaciones sindicales comportara cualquier forma de integración o unificación, esta habría de ser decidida congresualmente por un Congreso.

DEMOCRÁTICA: La Confederación Intersindical se rige por los más amplios principios de democracia, aplicándose en la vida interna de los órganos confederales y en los sindicatos, federaciones y confederaciones miembros de la Confederación las siguientes normas fundamentales:
a) Toda persona afiliada a cualquier sindicato de la Confederación podrá participar, en igualdad de derechos con los demás miembros, personalmente o por medio de representantes, en el establecimiento de la línea sindical, en la adopción de políticas específicas concretas, en la designación de los diversos niveles de responsabilidad. Puede ser nombrada para ostentar la representación orgánica o sindical de otros afiliados y afiliadas y promovida a tareas de responsabilidad sindical.
b) Todos los cargos son cubiertos mediante elección y serán revocables. Se celebrarán elecciones en los plazos señalados en los estatutos. Su gestión será transparente y rendirán cuentas a los órganos que representan.
c) En todas las organizaciones y órganos de la Confederación está garantizada a sus miembros la plena libertad de expresión sobre temas a debate, la manifestación pública de sus eventuales desacuerdos y el respeto de las posiciones particulares o colectivas.
d) Las decisiones de los órganos confederales son adoptadas por mayoría simple, excepto en el caso de que haya una mayoría de abstenciones, en el que los propios órganos decidirán si se vuelve a discutir o si se traslada la discusión a las organizaciones miembros. Si el tema es urgente se podrá hacer una segunda votación, que se aprobará por mayoría simple. La urgencia se determinará por mayoría simple.
e) En el interior de la Confederación pueden surgir corrientes de opinión, que reflejen posturas colectivas tanto en torno a problemas concretos como a cuestiones de carácter general. Todos los afiliados y todas las afiliadas tienen el derecho a participar en la formación de dichas posiciones colectivas. La Confederación Intersindical facilitará los medios que permitan recoger, aclarar y debatir democráticamente las distintas posiciones que aparezcan en su seno, para que las mismas no se transformen en actitudes sectarias que hagan peligrar la unidad de la Confederación. Las posturas colectivas minoritarias no podrán presentar sus posiciones como oficiales de la Confederación. La Confederación garantizará la representación de las minorías mediante los correspondientes mecanismos de elección.

ASAMBLEARIA: Las organizaciones miembros de la Confederación Intersindical han de regirse por el carácter asambleario; en cuanto a su funcionamiento y estructura, la asamblea de afiliados y afiliadas es el máximo órgano de decisión de las diferentes organizaciones de la Confederación. Las asambleas generales de trabajadores y trabajadoras serán el genuino método de participación, consulta y decisión a utilizar por las diferentes organizaciones de la Confederación para contrastar su acción sindical. Los miembros de la Confederación Intersindical impulsarán asambleas generales de trabajadores y trabajadoras, como medio de reforzar la unidad y la participación.
Las diferentes organizaciones de la Confederación deberán replantearse las decisiones de sus órganos cuando sean claramente rechazadas por la mayoría de los trabajadores y trabajadoras, y esto será un elemento fundamental que tener en cuenta cuando se establezcan procesos de relación con otras organizaciones o colectivos de trabajadores y trabajadoras.

AUTÓNOMA: La Confederación Intersindical es una organización sindical con entidad y autonomía propias, que toma sus decisiones según su propia dinámica interna. La Confederación es independiente de la patronal, del aparato del Estado, de las instituciones, públicas o privadas, y de toda organización religiosa, y no está subordinada a organización o partido político alguno ni a cualquier otro grupo de presión, sea económico, religioso o ideológico.

CONFEDERAL: Los miembros de la Confederación, es decir, los sindicatos, las federaciones o las confederaciones territoriales que libremente se integran tienen reconocida por el Congreso su plena soberanía, de acuerdo con las definiciones propias que cada cual regule en sus estatutos, y de acuerdo con las cesiones necesarias para la existencia orgánica y el funcionamiento de la propia Confederación, reguladas por los documentos congresuales.
La Confederación garantizará la soberanía de cada una de sus organizaciones miembros, atendiendo a las características regionales y nacionales de cada una de ellas, lo que constituye una de las señas de identidad de nuestro sindicalismo. Asimismo, los diversos órganos tendrán autonomía administrativa y de gestión, dentro de las limitaciones establecidas por los Estatutos.

DE CLASE: Las diferentes organizaciones de la Confederación constituyen una confederación de sindicatos que agrupa a trabajadores y trabajadoras del Estado Español como parte integrante de la clase trabajadora, buscando la coordinación real con el movimiento obrero y sus organizaciones, reforzando sus lazos con todas las trabajadoras y todos los trabajadores de todos los sectores laborales para defender con más fuerza la lucha contra las desigualdades sociales frente a las ofensivas de la patronal y de los gobiernos que no avancen claramente en esta lucha y por las mejoras de las condiciones de vida de las clases más desfavorecidas. La Confederación Intersindical rechaza cualquier tipo de actitud corporativa tanto en su seno como en los planteamientos reivindicativos. Y se define de izquierdas, porque es crítica con el injusto orden social capitalista existente y persigue su transformación; porque pone al servicio de esta su acción sindical y sociopolítica; y porque hace suyas las causas solidarias: lucha contra la pobreza y la exclusión social, por la solidaridad es solidaria con la población inmigrante, y el apoyo apoya a los pueblos del mundo que padecen la dependencia a la que los condena el sistema neoliberal.

INTERNACIONALISTA: La Confederación buscará la unidad internacional con los trabajadores y trabajadoras para colaborar en la lucha contra toda explotación y por universalización de los derechos humanos y sociales. La Confederación Intersindical es solidaria con todos los pueblos del mundo que luchan por su liberación nacional y social. La Confederación es además solidaria con las trabajadoras y con los trabajadores de todo el mundo que luchan contra toda explotación, y defiende los derechos humanos y sociales.
La Confederación entiende el internacionalismo como una práctica de solidaridad política activa y no de carácter asistencial. Expresión fundamental de ese internacionalismo debe ser, por un lado, apoyar las luchas de las personas inmigrantes de otras nacionalidades que residen y trabajan en el Estado Español y, por otro, denunciar las políticas globalizadoras capitalistas que mantienen al llamado Tercer Mundo en la pobreza y el subdesarrollo.

SOCIOPOLÍTICA: La Confederación Intersindical, además de reivindicar la mejora de las condiciones laborales y profesionales de los trabajadores y trabajadoras, asume la defensa de todas las cuestiones políticas y sociales que les afectan, en la perspectiva de la supresión de toda explotación o discriminación. Es solidaria con el resto de la clase trabajadora en la solución de problemas generales: el hambre, la enfermedad, la ignorancia, el paro, la violación de los derechos humanos, la explotación de la infancia, la discriminación de las mujeres, la discriminación por orientación o identidad sexual, lengua, etnia o condición, la explotación del individuo y de los pueblos, la guerra, la degradación del el medio ambiente, etc.
Cooperará con las demás organizaciones sindicales, sociales y políticas del mundo que tengan como objetivos la superación de la sociedad de clases y la implantación de la paz universal fundada en la igualdad y la justicia.

REPUBLICANA. La Confederación Intersindical considera que la República es el modelo de Estado la forma de gobierno que mejor expresa la voluntad popular, al tiempo que enmarca esta característica en la reivindicación del proceso democrático iniciado el 14 de abril de 1931, truncado por el golpe de estado del 18 de Julio de 1936 que dió lugar a uno de los más oscuros y trágicos períodos de nuestra historia.

FEMINISTA: La Confederación Intersindical lucha para terminar con las discriminaciones a las que están sometidas las mujeres en el campo laboral, profesional, familiar y jurídico. Trabajamos para visualizar las aportaciones de las mujeres a la historia, a la cultura y a la ciencia, así como sus contribuciones en tantas zonas del planeta al desarrollo efectivo de una cultura de paz y contra la injusticia.

ECOLOGISTA: La Confederación Intersindical y sus miembros lucharán contra la destrucción del medio ambiente y la degradación de la naturaleza, posicionándose a favor de la conservación del medio, colaborando con las organizaciones sociales y participando en las iniciativas y actuaciones encaminadas a este fin. Esta lucha ha de enmarcarse en la consecución de la mejora de las condiciones y la calidad de vida de los trabajadores y trabajadoras.

REIVINDICATIVA: La Confederación Intersindical defiende las reivindicaciones de los trabajadores y trabajadoras y la mejora de sus condiciones de trabajo.

PLURAL Y REIVINDICATIVA: La Confederación Intersindical está formada por organizaciones y personas de diferentes culturas políticas, ideológicas y sociales que asumen libremente su afiliación y encuentran un marco de respeto a esas diferencias. El debate democrático, el diálogo y la participación en las decisiones serán las normas que garantizan la pluralidad. Este carácter implica un compromiso de los trabajadores y las trabajadoras para exigir a los gobiernos que avancen en la lucha contra las desigualdades en favor de las clases oprimidas.

LAICA: La Confederación Intersindical no sólo es independiente de ideas, creencias y organizaciones religiosas, sino que lucha porque las instituciones y los servicios públicos no estén sujetos a ninguna confesión o credo religioso. En consonancia con este planteamiento, la Confederación Intersindical lucha por promover la libertad de cada individuo para creer en cualquier religión o ideología y para que, en el plano político y social, no existan cortapisas a la libertad de conciencia, el debate y la crítica libre.

PACIFISTA NO VIOLENTA: La Confederación Intersindical trabaja para erradicar cualquier manifestación de violencia física o psicológica en cualquier ámbito de la vida privada, laboral o pública y fomentando las iniciativas no-violentas como forma de resolución de los conflictos.

TÍTULO IV - DE LAS ORGANIZACIONES INTEGRANTES.

Artículo 8

1. Podrán formar parte de la Confederación Intersindical los sindicatos, federaciones y confederaciones que soliciten formar parte de la misma, se comprometan a cumplir los Estatutos y las condiciones o modalidades de adhesión que se establezcan, y cuya solicitud de vinculación, adhesión o integración sea aceptada por acuerdo del Pleno o Congreso confederales.
2. Las organizaciones integrantes de la Confederación Intersindical tendrán ámbito territorial de nación, país, nacionalidad, comunidad autónoma, región, ciudad autónoma, organizándose también según los diferentes sectores laborales.
3. Las organizaciones que se integren en la Confederación Intersindical, aun manteniendo transitoriamente su estructura organizativa propia, tenderán a organizarse conforme a lo establecido en el párrafo anterior.
4. En cada uno de estos ámbitos únicamente podrá existir un sindicato, federación o confederación miembro de la Confederación Intersindical. Si en el ámbito territorial de región, país o nacionalidad no existe organización miembro de la Confederación podrán vincularse a la misma organizaciones de ámbito provincial, nacional y/o sectorial pertenecientes a ese país, esa nacionalidad o esa entidad territorial.

Artículo 9
Las Organizaciones integrantes de la Confederación Intersindical deberán reflejar claramente en sus estatutos que podrán afiliarse todos los trabajadores y trabajadoras si así lo decidieran, en cualquier situación laboral en que se encuentren, teniendo como única limitación las incompatibilidades que se establezcan en cada estatuto.

Artículo 10
Dejarán de formar parte de la Confederación Intersindical:
1. Los sindicatos, federaciones y confederaciones integrantes por libre decisión comunicada por escrito a los órganos de gobierno de la Confederación.
2. Los sindicatos, federaciones y confederaciones integrantes por incumplimiento de los Estatutos, por impago de las cuotas durante seis meses —sin causa justificada- o por incumplimiento de las condiciones y modalidad, si se hubiera establecido, de su vinculación, adhesión o integración.

Artículo 11
Soberanía y vinculación:
1. Las organizaciones que forman parte de la Confederación tienen plena soberanía de decisión y actuación en todo lo relativo a su propio ámbito territorial y competencial.
La Confederación, según la modalidad de adhesión, no podrá en ningún caso interferir las decisiones de sus miembros, ni las que estos adopten respecto de sus afiliados o afiliadas, siempre que aquellas fueran conformes a los estatutos que los rigen.
2. Las organizaciones que forman parte de la Confederación no podrán adoptar decisiones contrarias a las de la Confederación en principios contenidos en estos Estatutos o en los acuerdos congresuales.
3. Para todos los sindicatos, federaciones y confederaciones es siempre vinculante el deber de transmitir a los afiliados y afiliadas, según su propia dinámica, las propuestas y acuerdos de los órganos confederales.
4. Los acuerdos confederales vincularán a todos los miembros de la Confederación, aun cuando estos conservarán su soberanía para no hacerlo si concurrieran circunstancias especiales, en cuyo caso, además de exponer las razones a la Confederación, no podrán hacer campaña pública alguna contra el acuerdo al cual no se vinculan.
5. Las organizaciones que forman parte de la Confederación podrán vincularse, adherirse o integrarse en su sentido más amplio con otras organizaciones o colectivos de carácter nacional y/o autonómico para constituir una estructura de mayor amplitud si así lo determinan los órganos competentes, sin que ello suponga su desvinculación de la Confederación Intersindical.
6. Las organizaciones que forman parte de la Confederación Intersindical podrán establecer vinculaciones especiales con otros miembros de la propia confederación con objeto de trabajar sobre objetivos que les sean comunes. En ningún caso su actuación podrá ir contra las decisiones confederales.

Artículo 12
Derechos y deberes de los miembros sindicatos, federaciones y confederaciones de la Confederación Intersindical:

1. Derechos:
a) Participar en los órganos de gobierno de la Confederación, de acuerdo con lo previsto en los presentes Estatutos; proponer, intervenir en debates y votar conforme se establece en estos Estatutos.
b) Controlar los gastos, recibir información objetiva, consultar los archivos, utilizar los servicios de que se disponga en la Confederación.
c) Ser representados y defendidos por la Confederación ante cualquier instancia, pública o privada, en todos los niveles y ámbitos territoriales o funcionales.
d) Recurrir a los órganos de la Confederación en caso de conflicto.

2. Deberes:
a) Cumplir los Estatutos y las condiciones y modalidad, si se hubiera establecido, para la vinculación, adhesión o integración, así como la línea de acción sindical de la Confederación.
b) Asistir a las reuniones de los órganos de gobierno de la Confederación.
c) Participar activamente en cuantas tareas se organicen.
d) Aportar con puntualidad las cuotas establecidas.

Artículo 13
Medidas disciplinarias:
1. Los órganos de gobierno de la Confederación Intersindical podrán adoptar medidas disciplinarias aplicables a sus miembros, por incumplimiento de sus deberes o por la realización de actividades contrarias a los fines de la Confederación señalados en estos Estatutos.
2. Las medidas disciplinarias adoptables podrán ser: amonestación, suspensión temporal de derechos de los miembros y expulsión.
3. Antes de adoptar cualquier medida firme:
- se deberá abrir, por el órgano que pretenda adoptar la medida, un expediente, tramitado por la persona o personas designadas por dicho órgano,
- el presunto infractor deberá ser escuchado en el órgano que pretende adoptar la sanción.
4. Una vez hecha firme la medida disciplinaria y comunicada por escrito al miembro objeto de la misma:
- la organización sancionada podrá recurrir al órgano de gobierno superior al que adoptó la medida disciplinaria,
- habiendo recurrido al órgano superior y habiendo adoptado este una decisión, la organización sancionada podrá recurrir a la Comisión de Garantías, cuya decisión será recurrible ante el Congreso Confederal.
5. Los órganos de gobierno inferiores, ante una decisión —sobre la medida disciplinaria por ellos tomada- que adopte un órgano de gobierno superior, y con la que estén en desacuerdo, podrán asimismo recurrir a la Comisión de Garantías, cuya decisión será inapelable en el ámbito interno de la Confederación Intersindical.
6. El proceso de adopción de la medida disciplinaria deberá estar finalizado como máximo a los sesenta días contados desde la apertura del expediente, salvo que se recurra al Congreso Confederal.
7. La decisión de la Comisión de Garantías podrá ser recurrida por la organización sancionada por los órganos de la Confederación ante los Tribunales de Justicia, a los que también será recurrible la decisión adoptada por el Congreso Confederal en su caso.
8. No obstante lo establecido en los puntos anteriores, el impago de cuotas u otro tipo de cotizaciones o el retraso en el pago de las mismas con posterioridad al último día del primer mes de cada trimestre natural supondrá automáticamente, y con carácter firme, la suspensión del derecho de votación en los órganos confederales, siempre que no hubiera existido acuerdo de los órganos confederales al objeto de flexibilizar el pago. La suspensión dejará de surtir efecto en el momento en que la cuota o cotización haya sido abonada o liquidada.

TÍTULO V - ÓRGANOS DE LA CONFEDERACIÓN.

Artículo 14
1. Los órganos de gobierno de la Confederación son: Congreso Confederal, Pleno Confederal, y Secretariado Confederal.
2. La Confederación se dota además de Secretariados y Plenos sectoriales que podrán decidir en su ámbito.
3. En todos los Órganos de Gobierno de la Confederación Intersindical se procurará la presencia de un 40% de mujeres como mínimo.

Artículo 15
El Congreso Confederal es el órgano máximo deliberante y decisorio de la Confederación Intersindical, pudiendo ser ordinario y extraordinario. El Congreso Ordinario se convocará por el Pleno Confederal, como mínimo cada cuatro años, al menos con tres meses de antelación.

Artículo 16
El Congreso Extraordinario se convocará por decisión del Pleno Confederal o por este a petición de un tercio de los sindicatos, federaciones y confederaciones miembro. En ambos casos el Pleno Confederal dispondrá de quince días para convocar el Congreso Extraordinario, cuya convocatoria deberá comunicarse a todos los miembros con un mes de
anticipación como mínimo. En la solicitud de Congreso Confederal Extraordinario habrá de figurar la razón de la convocatoria del mismo.

Artículo 17
Serán funciones del Congreso Confederal:
1. Aprobar o modificar los Estatutos de la Confederación.
2. Debatir y aprobar los grandes ejes de Acción Sindical.
3. Aprobar los criterios de funcionamiento económico y de establecimiento de cuota, así como supervisar el control financiero.
4. Ratificar, mediante sufragio libre y secreto, a los miembros del Secretariado Confederal, propuestos por los sindicatos a los que representen.
5. Elegir y/o ratificar a los miembros de la Comisión de Coordinación. Esta competencia sería ejercida por el Pleno Confederal en los periodos intercongresuales.
6. Elegir, mediante sufragio libre y secreto, la Comisión de Garantías.
7. Fijar los criterios de composición del Pleno Confederal, que siempre serán proporcionales a la afiliación.
8. Adoptar medidas disciplinarias, si lo estima conveniente, y resolver recursos, si se le plantean.
9. Decidir sobre la creación de sectores estructurados autónomamente.
10. Decidir sobre la vinculación, adhesión o integración de sindicatos, federaciones o confederaciones que soliciten formar parte de la Confederación, con la modalidad y condiciones específicas si así se establecieran.
11. Decidir sobre la vinculación, adhesión o integración de la Confederación en las organizaciones señaladas en el Artículo 3, así como decidir sobre la formación de coaliciones con otras organizaciones sindicales. En aquellos casos que no supongan modificación del régimen jurídico de la Confederación, esta competencia podrá ser ejercida por el Pleno Confederal en los periodos intercongresuales.
12. Decidir sobre la disolución de la Confederación, de acuerdo con lo establecido en los artículos correspondientes de los presentes estatutos.
13. Otorgar los poderes de representación y Poderes Generales para Pleitos previstos en los artículos correspondientes de los presentes estatutos. Asimismo, le corresponderá revocar todos los poderes otorgados.

Artículo 18
El Pleno Confederal es el máximo órgano de gestión, administración, gobierno, representación y decisión de la Confederación entre Congresos.

Artículo 19
El Pleno Confederal estará compuesto por las delegaciones representantes de los sindicatos, federaciones y confederaciones integrados, adheridos o vinculados a la Confederación, de acuerdo con la siguiente tabla de proporcionalidad:

- hasta 250 cotizantes, 1 persona
- hasta 500 cotizantes, 2 personas
- hasta 750 cotizantes, 3 personas
- hasta 1000 cotizantes, 4 personas

Por cada 500 cotizantes o fracción, a partir de 1000, un miembro más del Pleno.
También formarán parte del Pleno Confederal las personas integrantes del Secretariado Confederal, la representante de la Organización de Mujeres (con voz y voto) y las personas integrantes de la Comisión de Coordinación (con voz y sin voto).
A los Plenos Confederales podrán asistir, con voz pero sin voto, los afiliados y las afiliadas de cualquier sindicato miembro.
Las distintas organizaciones integrantes de la Confederación Intersindical procurarán que su delegación sea representativa, intentando que la delegación tenga una representación equilibrada de mujeres y hombres, así como de los sectores.

Artículo 20
El Pleno Confederal se reunirá como mínimo una vez al año, coincidiendo con el último trimestre del mismo, convocado por el Secretariado Confederal. Extraordinariamente se reunirá cuando el Secretariado Confederal lo considere oportuno o lo soliciten un tercio de los miembros del Pleno o un tercio de los sindicatos, federaciones o confederaciones que integran la Confederación Intersindical de la Confederación.

Artículo 21
Serán funciones del Pleno Confederal, como máximo órgano de decisión entre Congresos:
1. Convocar el Congreso Confederal.
2. Cumplir y hacer cumplir las directrices aprobadas por el Congreso.
3. Ratificar, mediante sufragio libre y secreto, a los miembros del Secretariado Confederal propuestos por los sindicatos a los que representen.
4. Proponer el cese de todos o alguno de los miembros del Secretariado Confederal a sus sindicatos respectivos, atendiendo a los siguientes criterios:
a) La propuesta de cese de la totalidad de los miembros del Secretariado a sus respectivos sindicatos, federaciones o confederaciones requerirá una previa moción de censura aprobada por mayoría absoluta. En este caso, se procederá a la convocatoria de un Congreso Extraordinario.
b) La propuesta de cese individual de algún miembro del Secretariado se producirá por incumplimiento de sus deberes y tareas dentro de la Confederación o a petición propia. En el caso de cese individual, la sustitución se realizará por el Pleno a propuesta de los sindicatos afectados, procediéndose a la ratificación o elección, según corresponda.
c) En caso de desacuerdo entre el Pleno Confederal y el Sindicato, Federación o Confederación, el tema será dilucidado por la Comisión de Garantías. El dictamen de esta será inapelable para ambas partes.
d) Cada organización confederada podrá decidir la revocación o el cese de sus representantes.
5. Ratificar o no, a propuesta de los órganos confederales, mediante sufragio libre y secreto, a los componentes de la Comisión de Coordinación, así como los miembros de las comisiones que se decida crear.
6. Debatir y aprobar la planificación anual de la acción sindical de la Confederación Intersindical, conforme a los ejes aprobados en el Congreso Confederal.
7. Aprobar los presupuestos y adaptar las cuotas de los miembros de la Confederación. Aprobar la adquisición y alquiler de bienes mobiliarios e inmobiliarios, concertación de préstamos y créditos bancarios, y todas aquellas facultades en el sentido más amplio que sean necesarias para asegurar el funcionamiento regular de la Confederación.
8. Modificar los Estatutos en periodo entre Congresos, si bien sólo podrá realizar modificaciones obligadas por imposición o normativa legal.
9. Decidir sobre la creación de sectores estructurados autónomamente.
10. Decidir sobre la vinculación, adhesión o integración de sindicatos, federaciones o confederaciones que soliciten formar parte de la Confederación Intersindical, con la modalidad y condiciones específicas, si se establecieran, y sobre la vinculación, adhesión o integración de la Confederación en las organizaciones señaladas en el Artículo 3, así como decidir sobre la formación de coaliciones con otras organizaciones sindicales siempre que ello no suponga modificación del régimen jurídico de la Confederación. En todo caso deberán acatar los estatutos y las líneas generales de acción sindical aprobadas por los congresos respectivos de cada sindicato territorial.
11. Adoptar medidas disciplinarias, si lo estima conveniente, y resolver recursos, si se le plantean.
12. Otorgar y revocar los Poderes de Representación y Poderes Generales para Pleitos previstos en los artículos correspondientes de los presentes estatutos, de acuerdo con el procedimiento que se establezca en el Pleno. Es competencia asimismo del Pleno Confederal la decisión sobre las condiciones de vinculación, adhesión o integración de nuevos miembros en la Confederación, así como las cartas de relaciones que puedan establecerse.

Artículo 22
Funcionamiento del Pleno Confederal:
1. Será convocado por el Secretariado Confederal en primera convocatoria y media hora más tarde en segunda convocatoria. Quedará constituido en primera convocatoria si están presentes la mitad más uno de sus miembros y al menos dos tercios de los sindicatos, y en segunda convocatoria si están presentes la mitad más uno de sus miembros y un tercio de los sindicatos confederados.
2. El Secretariado propondrá al Pleno una Mesa formada por tres personas, que desempeñarán las tareas de presidencia, moderación y secretaría.
3. La Presidencia y la Secretaría deberán ser ocupadas, preferentemente, por miembros del Secretariado. El moderador o moderadora se elegirá de entre las personas miembros de las diferentes organizaciones de la Confederación por turno rotatorio.
4. El Pleno aceptará o rechazará la Mesa propuesta; de rechazarla, el Secretariado o los miembros del pleno podrán efectuar nuevas propuestas.
5. La Mesa tendrá por función dirigir los debates, someter a votación los temas a decidir, y dirigir y ordenar la marcha del proceso de trabajo. Tendrá todo tipo de atribuciones para el cumplimiento de sus funciones. Podrá ser revocada por la mitad más uno de los miembros del Pleno, procediéndose en tal caso a la elección de una nueva Mesa.
6. Al principio de la sesión se acordará por mayoría simple la hora de finalización de la reunión, no pudiéndose realizar votación alguna después de dicha hora de finalización.

Artículo 23
Las decisiones del Pleno Confederal son adoptadas por mayoría simple, excepto si hubiera una mayoría de abstenciones. En este caso se volverá a discutir el tema.

Artículo 24
El Secretariado Confederal es el órgano de gestión, administración, gobierno, representación y decisión de la Confederación entre Plenos Confederales, siendo a su vez el órgano encargado de llevar a cabo los acuerdos tomados por el Pleno Confederal. Es responsabilidad del Secretariado Confederal:
1. El registro y documentación de las Organizaciones miembros de la Confederación.
2. Representar a la Confederación. Si el Pleno designase una comisión específica para representar a la Confederación, será esta la que realice su labor de representación.
3. La dirección y coordinación de las Áreas de Trabajo, así como de las comisiones o Secretarías que pudieran crearse.
4. La ejecución de lo acordado por el Pleno Confederal.
5. La convocatoria del Pleno Confederal.
6. Informar a los Sindicatos, Federaciones y Confederaciones miembros de los temas de interés sindical.
7. La elaboración de propuestas para su discusión. Recogida y debate de las propuestas hechas por las diferentes organizaciones de la Confederación.
8. La propuesta al Pleno de medidas disciplinarias si lo estima conveniente.
9. Decidir en los temas cuya urgencia o importancia requieran una respuesta inmediata, debiendo informar a todos los miembros de la Confederación. El Pleno Confederal posterior ratificará o no tal decisión. Dicha decisión deberá atenerse siempre a los acuerdos adoptados por Plenos Confederales anteriores, en caso de que los hubiese.
10. Proponer al Pleno los miembros de la Comisión de Coordinación y comisiones negociadoras.
11. Los integrantes del Secretariado Confederal serán miembros de pleno derecho de los Congresos Confederales.
12. Otorgar y revocar los Poderes Generales y para Pleitos previstos en los artículos correspondientes de los presentes estatutos.

Artículo 25
Para mejorar la operatividad de los Secretariados y Plenos Confederales:
1. Se establecerá un reglamento de funcionamiento de los mismos, que desarrolle su marco estatutario y que contemple calendario, constitución, orden del día, mesa, ordenación de los debates, reparto y uso de los tiempos, preparación y documentación previa, establecimiento de comisiones en su seno, etc.
2. Podrán celebrarse sesiones específicas entre sindicatos que tengan en común algún tipo de problemática concreta, previo conocimiento del Secretariado Confederal e informando con posterioridad de las discusiones habidas y acuerdos alcanzados.

Artículo 26
Formarán parte del Secretariado:
1. Por afiliación:

- 1 persona por cada organización confederada, de 1 hasta 1000 afiliados/afiliadas
- 2 personas, de 1001 a 2000 afiliados/afiliadas
- 3 personas, de 2001 a 3001 afiliados/afiliadas
- 4 personas, de 3001 afiliados/afiliadas en adelante.

Cada organización confederada podrá designar tantos miembros suplentes como titulares le correspondan en el Secretariado Confederal, según lo previsto en el párrafo correspondiente del presente punto. Los suplentes tendrán las mismas atribuciones que los titulares cuando sustituyan a estos últimos. La designación de los miembros suplentes se hará en los mismos términos y con las mismas garantías que la de los titulares.
2. Una representante de la Organización de Mujeres.
3. Los miembros de la Comisión de Coordinación, con voz pero sin voto.
4. Los distintos miembros de la Confederación Intersindical procurarán que la delegación tenga una representación equilibrada de mujeres y hombres, así como de los sectores.
5. Será causa de baja en el Secretariado la no asistencia de uno de sus miembros a tres sesiones consecutivas en las reuniones ordinarias, o a seis no consecutivas en el plazo de un año. La baja también se podrá producir a petición propia.

Artículo 27
El Secretariado Intersindical Confederal se reunirá ordinariamente una vez al trimestre y extraordinariamente cuantas veces sea necesario, convocado por la Comisión de Coordinación o por un tercio de los miembros del mismo Secretariado.

Artículo 28
Funcionamiento del Secretariado:
1. Quedará constituido en primera o segunda convocatoria, media hora más tarde, si están presentes la mitad más uno de sus miembros.
2. Las reuniones serán presididas por Presidencia y Secretaría, que serán miembros del Secretariado o de la Comisión de Coordinación. Las reuniones serán presididas por un miembro del Secretariado Confederal, con voz y voto, y actuará como secretario un miembro de la Comisión de Coordinación, con voz y sin voto.
3. Las decisiones del Secretariado son adoptadas por mayoría simple de los presentes.
4. Al principio de la sesión de acordará, por mayoría simple, la hora de finalización, no pudiendo tener lugar votación alguna después de dicha hora.
5. A las reuniones del Secretariado podrán asistir todas las personas afiliadas que lo consideren oportuno, con voz pero sin voto.

Artículo 29
Incompatibilidades. No podrán formar parte del Secretariado Confederal las personas afiliadas que mantengan una doble afiliación sindical ni los altos cargos de la Administración Pública u organizaciones empresariales, así como quienes sean representantes públicos o miembros de los comités ejecutivos o centros de dirección de los partidos políticos.

Artículo 30
1. La Confederación Intersindical se dotará de una Comisión de Coordinación dependiente del Secretariado Confederal. Sus miembros no son elegidos de entre los componentes del Secretariado.
2. Las personas miembros de la Comisión de Coordinación lo son asimismo tanto del Secretariado como del Pleno Confederales, a cuyas sesiones asistirán con voz pero sin voto. Las personas de la Comisión de Coordinación no podrán ostentar en el Secretariado representación formal de sindicato o sector alguno.
3. La elección de las personas que componen la Comisión de Coordinación corresponde al Pleno Confederal. El Secretariado Confederal indicará el perfil necesario para cubrir los puestos vacantes en la Comisión de Coordinación. Los sindicatos propondrán para dichos puestos a aquellas personas de entre sus afiliados que respondan a los perfiles indicados. En la Comisión de Coordinación se procurará una presencia equilibrada de mujeres y hombres.
Además, formarán parte de la Comisión de Coordinación las personas que ocasionalmente apoyen tareas centrales de la confederación si así lo decide el Pleno Confederal o en su defecto el Secretariado Confederal.
4. Los miembros de la Comisión de Coordinación podrán ser revocados por el Pleno Confederal.
Serán funciones de la Comisión de Coordinación:
a) Realizar el seguimiento de los acuerdos adoptados por el Secretariado.
b) Representar a la Confederación en ausencia del Secretariado por mandato del mismo o de la Comisión Específica, si el Pleno la hubiese designado.
c) Formar parte de la Mesa del Pleno y del Secretariado.
d) Realizar las tareas que le encomiende el Pleno o el Secretariado, entre las que se encontrarán las siguientes:

- Elaboración de estudios y documentos de información, comparación y análisis.
- Archivo y canalización hacia las diferentes organizaciones de la Confederación de toda la información recibida.
- Elaboración de las actas de los distintos órganos confederales.
- Convocatoria de las reuniones de los distintos órganos confederales.
- Asistencia a reuniones pertinentes.

Artículo 31
1. La soberanía de cada organización confederada es absoluta para determinar su acción sindical específica; para los temas que vinculen a varios territorios serán las diferentes organizaciones de la Confederación incluidas en ese ámbito las que determinen su acción sindical.
2. A tal efecto, las diferentes organizaciones de la Confederación implicados se reunirán autónomamente cuando consideren oportuno y tomarán las decisiones que consideren precisas, elevando de un informe al Secretariado Confederal.
3. La firma de acuerdos que afecten al conjunto de la Confederación con la Administración o la Patronal en ningún caso podrá realizarse sin la aprobación previa de los órganos confederales, basada en el respeto al funcionamiento asambleario fijado en estos Estatutos.

Artículo 32
La Confederación podrá constituir Secciones Sindicales conforme a la legislación vigente.

TÍTULO VI - SECTORES ESPECÍFICOS.

Artículo 33
La Confederación Intersindical tiene una estructura territorial representativa de la realidad plurinacional del Estado. No obstante con carácter funcional organizará sectores estructurados por ámbitos laborales.
Los sectores tienen capacidad para decidir su acción sindical específica y organización interna, en el marco de los acuerdos tomados por los órganos confederales intersectoriales, Congreso, Pleno y Secretariado.
El sector de enseñanza se denomina Confederación de Sindicatos de Trabajadoras y Trabajadores de la Enseñanza (siendo sus siglas STEs-Intersindical), el Sector de Transporte Ferroviario se denomina Sindicato Ferroviario (siendo sus siglas SF-Intersindical) y el sector de función pública se denomina Sindicatos de Trabajadoras y Trabajadores de Administración y Servicios Públicos (siendo sus siglas STAS-Intersindical). El resto de sectores tienen capacidad para autodenominarse, aprobándose el nombre en un Pleno Confederal, que deberá ser ratificado por el siguiente Congreso.
Los sectores constituidos en la Confederación Intersindical se dotarán de un reglamento interno o estatutos sectoriales, que deberán ser aprobado por el correspondiente órgano sectorial.

Artículo 34
Los órganos sectoriales tendrán una estructura de base territorial. La representación en ellos será proporcional a la afiliación territorial de cada sector. Como mínimo, los sectores deberán dotarse de un Plenario Pleno sectorial. En todo caso cada organización territorial tendrá derecho al menos a dos representantes en los plenarios Plenos de sector.
Corresponde al plenario del sector a los órganos del sector:
a) Establecer la línea de acción sindical específica en el marco de acción sindical definido por el Pleno Confederal de la Intersindical.
b) Decidir acerca de los procesos negociadores en que se vea incurso el sector, respetando en todo caso el carácter asambleario que define a la organización.
c) Elaborar enmiendas para los congresos confederales.
d) Aprobar el reglamento interno o estatutos sectoriales.
Representantes de los sectores podrán asistir a las reuniones del Secretariado Confederal.
Los órganos sectoriales se dotarán de reglamentos de funcionamiento.
A las reuniones de los órganos sectoriales podrán asistir los afiliados y afiliadas de cualquier sindicato de la Confederación de ese sector, así como los miembros del Secretariado Confederal con voz, pero sin voto.

Artículo 35
La Confederación potenciará los Plenarios plenos subsectoriales cuando así lo solicitasen los órganos sectoriales competentes, como lugar de encuentro y debate en el que las diferentes organizaciones de la Confederación tratarán problemáticas subsectoriales específicas. Sus conclusiones y propuestas se remitirán a los órganos competentes de la Confederación Intersindical.
Estos órganos tienen la misión de elevar propuestas de trabajo y orientaciones sobre la acción sindical concreta a los órganos de gobierno de la Confederación. Tienen carácter deliberante, consultivo y de elaboración de propuestas. Se reunirán cuando las circunstancias así lo exijan y serán convocados por el Secretariado correspondiente.

Artículo XX. Ámbito competencial.
a. Los sectores organizados de la Confederación Intersindical tienen autonomía para debatir y tomar decisiones sobre cualquier asunto público o interno de la Confederación, siempre dentro del marco estatutario.
b. En ese sentido, tienen derecho a hacer llegar los resultados de esos debates al conjunto de las trabajadoras y de los trabajadores de cada sector en cada organización miembro de la Confederación, así como a recoger las opiniones de los mismos sobre cualquier asunto, práctica que es consecuente con el modelo asambleario que practica la Confederación.
c. Los sectores constituidos en el seno de la Confederación Intersindical respetarán, en todo caso, los dispuesto en el artículo 11 de los presentes Estatutos.

TÍTULO VII - ORGANIZACIÓN DE MUJERES.

Artículo 36
1. Los sindicatos, federaciones y confederaciones miembros deberán garantizar el derecho de las mujeres a organizarse en Secretarías, Áreas u Organizaciones de Mujeres, donde se aborde la problemática específica del campo laboral y social, donde promover iniciativas que hagan avanzar al conjunto de los sindicatos en la asunción de una línea sindical desde una óptica feminista, donde se impulse el estudio y la reflexión en la búsqueda de alternativas en situaciones concretas, como en el panorama social en general, orientadas a la erradicación del sexismo y a la lucha por la igualdad.
2. La Organización de Mujeres lleva a cabo su acción de forma transversal y tiene entre sus fines impulsar que la participación tienda a la presencia equilibrada de mujeres y hombres, además de aportar un análisis de género a toda la acción sindical confederal
3. La Organización de Mujeres estará constituida por el conjunto de las secretarías, áreas u organizaciones de mujeres existentes en cada organización de la Confederación Intersindical y las mujeres que pertenezcan a la Comisión de Coordinación. Para desarrollar el trabajo confederal se reunirá la Comisión de la Organización, formada por una mujer de cada sindicato, una mujer de la Comisión de Coordinación y la representante en el Secretariado Confederal, que a su vez será la representante de la Organización de Mujeres de la Confederación.
4. Será la Organización de mujeres quien proponga la forma de coordinación, con la elaboración de un reglamento de funcionamiento propio, así como la planificación y desarrollo del trabajo, que serán conocidos por todas y cada una de las diferentes organizaciones de la Confederación y ratificados en el Pleno Confederal.
5. La Organización de Mujeres planificará y realizará sus propias actividades de formación, al menos una vez al año, y dispondrá de un espacio específico en las publicaciones confederales, pudiendo además realizar publicaciones específicas
6. La Comisión de la Organización de Mujeres se reunirá al menos tres veces al año.
7. La representante en el Secretariado Confederal será propuesta por la Organización de Mujeres y ratificada por el Pleno Confederal. En ausencia de la representante de la Organización de Mujeres, podrá ser representada por una mujer de la Comisión de Coordinación o cualquier otra mujer que la Organización de Mujeres designe.
8. Dentro del Secretariado Confederal existirá un área de trabajo específica.
9. La Organización de Mujeres podrá presentar enmiendas como tal a las ponencias del Congreso Confederal.

TÍTULO VIII - COMISIÓN DE GARANTÍAS.

Artículo 37
1. La Comisión de Garantías estará formada por siete miembros elegidos, mediante sufragio libre y secreto, por el Congreso o en su defecto por el Pleno Confederal, en ambos casos por mayoría de 4/5 partes de sus miembros, sin que aquellos puedan forman parte de los órganos de gobierno de la Confederación y/o de los órganos nacionales de los diferentes sindicatos, federaciones y confederaciones que forman parte de la Confederación.
2. La Comisión de Garantías se constituirá con los criterios de paridad que se establezcan para todos los órganos confederales. En casos de conflictos que afecten a cuestiones de género consultará con la Organización de Mujeres para tomar sus decisiones.
3. Podrá introducir en el Orden del Día de las reuniones del Secretariado y/o del Pleno los puntos que estime oportunos.
4. Sus funciones serán:
a) Atender cualquier reclamación o recurso de miembros u órganos de la Confederación contra acuerdos o actuaciones de cualquier otro miembro u órgano.
b) Dictaminar, en caso de que se recurra a la misma, según lo establecido en el artículo correspondiente de los presentes estatutos.
5. Las decisiones de la Comisión de Garantías se ajustarán a derecho, para lo que podrá solicitar el asesoramiento jurídico oportuno.

1. La Comisión de Garantías es el órgano de control de las medidas disciplinarias internas, tanto de carácter individual como colectivo, sobre las organizaciones miembro de la Confederación o sobre sus órganos. Interviene en cuantas reclamaciones le presenten las personas miembros de órganos confederales o las organizaciones miembros de la Confederación sobre violación de los principios de democracia interna reconocidos en los Estatutos, lo cual generará, en su caso, las oportunas exigencias de responsabilidad ante los ámbitos pertinentes.
2. La Comisión de Garantías será elegida, siempre en número impar, por el Congreso Confederal y estará compuesta al menos por siete personas titulares y dos personas suplentes, que no podrán tener ninguna otra tarea o representación en los órganos de la Confederación ni de los miembros de esta. Las personas electas en el Congreso mantendrán sus cargos, salvo fallecimiento, dimisión o incapacidad, hasta el siguiente Congreso, en el que presentarán un balance de su actuación durante este período.
3. En el supuesto de fallecimiento, dimisión o incapacidad de titulares de la Comisión de Garantías pasará automáticamente a ocupar la vacante temporal o definitiva una persona suplente. Si la vacante fuera definitiva, esta persona pasará a ser titular. En el caso de que la Comisión de Garantías llegara a tener menos de cinco titulares, las vacantes que, por cualquier circunstancia, se puedan producir entre Congreso y Congreso podrán ser cubiertas con carácter provisional hasta un nuevo Congreso mediante elección en el Pleno Confederal.
4. Las resoluciones de la Comisión de Garantías deberán dictarse en el plazo máximo de dos meses, y son inapelables.
5. La Comisión de Garantías será dotada de un Reglamento de funcionamiento interno por el primer Pleno Confederal que se celebre tras la clausura del Congreso.
6. La Comisión de Garantías es un órgano sindical facultado para elaborar propuestas y sugerencias de carácter estatutario, funcional y teórico a los órganos confederales. En cualquier caso el recurso a la Comisión es preceptivo, es decir, no puede actuar autónomamente, sino sólo a demanda.
7. La Comisión de Garantías no es un órgano sindical consultivo.
8. Se requerirá un tiempo mínimo de cuatro años de afiliación en cualquier organización miembro de la Confederación para poder ser miembro de la Comisión de Garantías.
9. La Comisión de Garantías no es una instancia jurisdiccional superior a las comisiones de garantías, u órganos análogos, territoriales.

TÍTULO IX - RÉGIMEN ECONÓMICO.

Artículo 38
El Congreso, o en su defecto el Pleno Confederal, aprobará la Carta Económica, que recogerá los criterios de organización económica y financiera de la Confederación Intersindical.

Artículo 39
La Confederación Intersindical no cuenta con patrimonio fundacional. Se financiará con los recursos provenientes de la cuota de sus miembros, que será fijada por el Congreso o Pleno Confederal de acuerdo con los criterios establecidos en la Carta Económica. Podrá dotarse, asimismo, de recursos obtenidos de acuerdo a la legalidad vigente. Igualmente podrá solicitar y percibir subvenciones, ayudas o fondos legalmente establecidos.

Artículo 40
Existirá un Libro de Contabilidad, al que tendrán acceso libre —y sobre el que podrá pedirse cualquier tipo de explicaciones- cualquier sindicato, federación o confederación integrante de la Confederación Intersindical.

Artículo 41
El destino de los recursos económicos de la Confederación, que es organización sin ánimo de lucro, será financiar los gastos derivados de su propio funcionamiento y actividad como organización sindical.

TÍTULO X - LIBRO DE ACTAS. REPRESENTACIÓN A EFECTOS LEGALES, ADMINISTRATIVOS Y JUDICIALES.

Artículo 42.
Actas:
1. Existirá un Libro de Actas en el que necesariamente se vaya levantando acta de las sesiones del Congreso, del Secretariado Confederal, del Pleno Confederal y de los órganos sectoriales constituidos.
2. Las actas serán aprobadas, por mayoría simple, en la misma sesión de la que se levante acta o en posterior sesión.
3. Las actas de las sesiones serán firmadas por la persona responsable de la Secretaría, con el visto bueno de la persona que ejerza la Presidencia.

Artículo 43
La representación de la Confederación a efectos legales, administrativos y judiciales la ostentarán los miembros del Secretariado y de la Comisión de Coordinación y cualquier otra persona, además de las anteriores, designada por el Congreso o Pleno Confederales.

Artículo 44
La representación de la Confederación será otorgada a las personas señaladas en el artículo anterior ante notario, en las condiciones y con las características determinadas por el órgano que la otorgue.

Artículo 45
Las certificaciones de acuerdos adoptados por el Congreso, el Pleno o el Secretariado Confederales serán expedidas por quienes actúen como miembros de la Secretaría y Presidencia de la sesión del órgano en que se adoptaron los acuerdos, o bien serán expedidos por el miembro o miembros autorizados designados por el Secretariado Confederal al inicio de cada año.

TÍTULO XI - PERMANENTES SINDICALES.

Artículo 46
1. Las permanentes sindicales confederales son aquellos cupos de liberaciones para trabajar en la Confederación que obtenemos obtenidos directamente como Confederación Intersindical de las administraciones públicas o de las patronales; también tienen esta consideración los cupos de liberaciones que las diferentes organizaciones de la Confederación puedan traspasar ceder a la Confederación Intersindical para trabajar en tareas confederales.
2. Los miembros de la Comisión de Coordinación y del Secretariado Confederal que designe el Congreso o el Pleno Confederal dispondrán de permiso sindical para desempeñar las tareas centrales de la Confederación y aquellas otras que les puedan encargar el Pleno o el Secretariado Confederales.
3. El tiempo mínimo de liberación será de un año. Terminado el mismo la persona liberada podrá presentar su dimisión, que se aceptará de forma automática.
4. La renovación o no de las permanentes sindicales que trabajen en tareas confederales se decidirá por el Pleno Confederal a propuesta del Secretariado, previo informe del trabajo realizado. El Congreso, o en su defecto el Pleno Confederal, determinará los sectores, subsectores y áreas de trabajo a los que habrá que dedicar cupos de trabajo confederal.

TÍTULO XII - MODIFICACIÓN DE ESTATUTOS Y DISOLUCIÓN DE LA CONFEDERACIÓN.

Artículo 47
Los Estatutos podrán ser modificados por el Congreso. El Pleno Confederal podrá modificarlos en el caso previsto en los artículos correspondientes de los presentes estatutos.

Artículo 48
La Confederación Intersindical podrá disolverse si así se decidiera. La decisión pertinente será adoptada por un Congreso Extraordinario siempre que voten favorablemente 2/3 de los delegados/as del Congreso que representen a su vez a 2/3 de la afiliación de las organizaciones miembros de la Confederación. A dicho Congreso se asistirá con criterios de proporcionalidad en función del número de cotizantes.
En este Congreso se decidirá por mayoría simple el destino de los bienes y patrimonio de la Confederación, si lo hubiera. Asimismo designará la comisión liquidadora que ejecutará la decisión congresual.

DISPOSICIÓN TRANSITORIA PRIMERA

Los sectores que se configuren en la Confederación Intersindical provenientes de la Confederación de STEs y del Sindicato Ferroviario mantendrán su personalidad jurídica.
Esta Disposición será revisada en el próximo Congreso o en un pleno confederal convocado al efecto.

DISPOSICIÓN TRANSITORIA SEGUNDA

Sin perjuicio de lo establecido en los presentes estatutos, en un mismo territorio y transitoriamente podrán coexistir dos o más organizaciones pertenecientes a la Confederación, siempre que estas organizaciones sean de ámbitos distintos, manifiesten su voluntad de convergencia y se pongan de acuerdo para fijar su representación territorial en los órganos confederales.

DISPOSICIÓN TRANSITORIA TERCERA

Los nuevos órganos, tanto confederales como sectoriales, configurados según el modelo aprobado en el presente Congreso, deberán estar constituidos conforme a los Estatutos antes del 31 de agosto de 2008.

DISPOSICIÓN TRANSITORIA CUARTA

El Secretariado Confederal y /o el Pleno Confederal estarán facultados transitoriamente para asumir las competencias y funciones de los órganos sectoriales hasta que estos se constituyan y se organicen de acuerdo con su Reglamento y los Estatutos de la Confederación Intersindical

DISPOSICIÓN ADICIONAL PRIMERA

La Confederación de STEs-Intersindical, miembro fundacional de la Internacional de la Educación, seguirá formando parte de ella como organización sectorial de la Confederación Intersindical.

DISPOSICIÓN FINAL PRIMERA

Las lenguas de la Confederación serán las de los territorios que la integran. Son lenguas oficiales de la Confederación Intersindical el castellano, el catalán, el gallego, el euskera y el asturiano.

DISPOSICIÓN FINAL SEGUNDA

Los reglamentos internos o estatutos sectoriales a los que se refiere el artículo 33, una vez aprobados, serán anexados a los presentes Estatutos Confederales y gozarán desde ese momento de rango estatutario a todos los efectos.

Ponencia de Organización

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1. Estado de la cuestión y objetivos generales.
El X Congreso Confederal encara, en lo referido a lo orgánico, un conjunto de debates con dos objetivos fundamentales: en primer lugar ha de actualizar el proceso de definición interna de la propia estructura confederal; además, debe revisar críticamente los modelos de funcionamiento interno que podríamos denominar clásicos de la Confederación.
No podemos negar que los consensos teóricos acordados en el anterior congreso han tenido diversa fortuna a la hora de ponerlos en práctica, han generado desacuerdos y, en ocasiones, hemos podido constatar que eran interpretados de maneras diferentes. No podemos tampoco soslayar el hecho de que en más de una ocasión los desajustes se han debido más a la interpretación estatutaria desde diferentes ámbitos confederales que a la letra propiamente dicha de los documentos que aprobamos en Salamanca. Ello nos lleva a concluir necesariamente que hemos de practicar una fuerte autocrítica, sobre todo en lo referido a nuestra propia inflexibilidad política, a nuestro empeño en ocasiones en fijar posiciones impermeables e intransigentes.
No está en cuestión ni el modelo confederal (no sólo es nuestro modelo orgánico, sino nuestro propio modelo de Estado), ni la apuesta política firme por la "intersindicalidad", ni la tolerancia y la comprensión hacia situaciones necesariamente transitorias, ni la soberanía de cada organización miembro, cuya parte de cesión libre sostiene y alimenta a la Confederación Intersindical. Sin embargo este consenso político, que es flexible en lo teórico, a veces
adolece de rigidez en la práctica, e incluso es sentido así en algunos territorios. La raíz del problema que esta percepción produce se halla, muy probablemente, en una definición confederal contradictoria: mientras por un lado hundimos nuestras raíces en los territorios, por otro esa definición se hace "por arriba", es decir, esos mismos territorios no alimentan ni la estructura ni las políticas confederales. Se produce entonces una escisión cuyo principal
efecto es el distanciamiento de la institución estatal (la Confederación) del sindicato territorial concreto, de resultas de lo cual alimentamos involuntariamente discusiones locales sobre la necesidad de la Confederación, su utilidad, su realidad o su futuro.
Es aquí, pues, donde encontramos uno de los problemas que deberíamos enfrentar con mayor decisión: la vinculación entre la Confederación y las partes que la forman. Si esta vinculación no es recíproca, si no existe retroalimentación mutua, cualquier proyecto confederal devendrá en una abstracción eminentemente teórica. En este marco tanto los órganos confederales como la propia organización del trabajo confederal son determinantes.
Antes de proponer objetivos concretos conviene aclarar que cuando en el presente documento hablamos de "confederación" nos referimos siempre a la institución entendida globalmente, y no a la estructura central de la misma. Esto se concreta en la posibilidad de que territorios concretos, o personas determinadas sin necesidad de liberación central, se responsabilicen de tareas confederales. Nuestro funcionamiento debe huir de la inercia según la cual el compromiso territorial es proporcional a las liberaciones recibidas, y también de que no hay tarea confederal central sin liberación específica.
Teniendo en cuenta lo anterior, los objetivos prioritarios que debemos afrontar a partir de este Congreso en el ámbito orgánico son los siguientes:

a. La Confederación como apoyo y refuerzo a los territorios: debe aportar formación, apoyo
concreto a la extensión sindical, personal y medios.
b. La Confederación debe recibir de los territorios información, aportaciones teóricas, propuestas políticas, experiencias, materiales y personal.
c. La Confederación debe garantizar el funcionamiento y la coordinación de los distintos sectores organizados en su seno. Debe canalizar sus propuestas y facilitar la circulación de la información. Debe articular las medidas necesarias para que los territorios reciban lo que necesiten, dentro de sus posibilidades.
d. La Confederación debe comprometerse a impulsar la visualización territorial de los sectores organizados internamente, siempre dentro del respeto confederal.
e. La Confederación debe comprometerse a canalizar los resultados de las reuniones orgánicas en la dirección acordada, así como a ayudar en la gestión de esos acuerdos. Las decisiones no pueden diluirse cuando finaliza la reunión del órgano pertinente.
f. El Secretariado Confederal debe recuperar su papel de verdadera dirección política en el nivel estatal.
g. Hemos de impulsar y/o reforzar la renovación del compromiso político territorial con el marco confederal y en el marco confederal.
h. Los sindicatos miembros de la Confederación Intersindical han de recuperar la expresión pública de su pertenencia a la misma.
i. En el ámbito estatal la Confederación ha de verse públicamente como referente sindical de clase, tanto ante las trabajadoras y los trabajadores como ante la opinión pública en general. Todos los objetivos expuestos serán modulados por nuestro propio carácter confederal: las posiciones políticas y las decisiones orgánicas confederales se fundamentan en el consenso en el marco territorial, es decir, se facilita su debate, su discusión y su cumplimiento, pero no se impone, jerárquicamente, en cada ámbito. Al mismo tiempo, y al margen de la relación orgánica, la vinculación política entre estructura central y territorios se basará en el principio: aportar según la capacidad, recibir según la necesidad.

2. El Pleno Confederal.
Es el máximo órgano de administración, gobierno, representación y decisión de la Confederación entre Congresos.
La base de la composición del Pleno es la representación de las diferentes organizaciones territoriales miembros de la Confederación. Las personas titulares del Secretariado Confederal son componentes del Pleno a todos los efectos, así como las personas de la Comisión de Coordinación, en este caso sin voto.
Consecuentemente con la existencia de sectores organizados confederalmente, cada uno de ellos podrá enviar representantes al Pleno Confederal. La Organización de Mujeres, en tanto que entidad confederal organizada transversalmente de acuerdo con lo dispuesto en los Estatutos vigentes, enviará igualmente representantes al Pleno Confederal, que gozarán de los derechos a voz y a voto.
Las actuales proporciones sobre las que se basa el número de personas de cada delegación territorial parecen adecuadas; en todo caso podrían estudiarse ajustes si se manifiesta su necesidad. La actual composición del Pleno Confederal es suficiente tanto para garantizar la operatividad del órgano como para no convertirlo en una especie de pequeño congreso. Por supuesto deben establecerse unos mínimos pertinentes para garantizar la representación suficiente de las organizaciones confederadas.
Consecuentemente con el carácter autocrítico que nos exigíamos más arriba, analizamos que actualmente la única utilidad real del Pleno Confederal es la formalidad que supone la aprobación del balance económico y del presupuesto del año en curso. Las llamadas "Líneas confederales de actuación" son un mero acúmulo cuantitativo, sin hilo conductor que merezca tal nombre, de las diferentes áreas de trabajo y de los sectores, que sólo generan debate en su gestación y corrección para ser olvidadas inmediatamente después. Todo intercambio es, así, infructuoso. Si el Pleno es el máximo órgano entre congresos debería además parecerlo, y hoy por hoy es un mero trámite en el que ya ni siquiera cabe, por extemporaneidad, la discusión sobre la pertinencia o no de tal diseño de áreas u organigrama y su necesario equipo de liberadas y liberados, por poner un ejemplo especialmente ilustrativo.
Por ello, la Ponencia propone que el Pleno anual (que siempre que sea posible debería celebrarse en enero) aborde como dos asuntos principales un Plan de Trabajo Confederal para el año natural, así como la aprobación si procede del balance económico y presupuesto correspondientes. El Plan de Trabajo Confederal contendrá los objetivos de cada área de trabajo y de cada sector, huyendo de la simple acumulación de propuestas y tendiendo a que constituya un documento globalizado e interrelacionado. Además, será fundamental que contenga los objetivos de ámbito confederal debidamente justificados. Otros debates de orden político, teórico, orgánico o del carácter que se precise podrán tener cabida en otros apartados de los órdenes del día.
Por último, entre las funciones principales del Pleno Confederal estará la coordinación de la actividad sectorial. Será preceptivo, en las reuniones ordinarias del mismo, un informe amplio de cada sector organizado de la Confederación, que el Pleno conocerá y sobre el que podrá adoptar acuerdos.

3. El Secretariado Confederal y las Áreas de Trabajo.
El Secretariado Confederal es el órgano de dirección política de la Confederación entre Plenos Confederales. Se encarga de trasladar a la acción sindical concreta las directrices aprobadas por los Plenos y el Congreso, y coordina en su caso las decisiones adoptadas por los órganos sectoriales. Asimismo, es el órgano de representación política de la
Confederación.
Estará compuesto por personas representantes de las organizaciones territoriales miembro de la Confederación, así como por representantes de la Organización de Mujeres. Las personas que componen la Comisión de Coordinación son igualmente miembros del Secretariado Confederal, con voz pero sin voto.
Funcionalmente, el Secretariado se organiza internamente en Áreas de Trabajo. El Secretariado es competente para proponer al Pleno la creación de las áreas de trabajo que considere necesarias. En todo caso para cada una de ellas de elegirá a una persona responsable de la misma. Tanto esta persona como el resto de las que componen el área
serán miembros del Secretariado, ya sea en calidad de titulares o de suplentes. Estas Áreas podrán ser dotadas de liberaciones procedentes de los cupos institucionales que aporte cada sector, pero esta circunstancia no es preceptiva: la misma existencia y la labor de un área no pueden depender de esta circunstancia.
Es posible, aunque se considera excepcional, que personas que no pertenezcan al Secretariado sean adscritas por su territorio a un Área determinada. En este caso espreceptivo el acuerdo mayoritario del Secretariado.
Las Áreas de Trabajo responden ante el Secretariado Confederal. Las personas que componen la Comisión de Coordinación se adscribirán a las Áreas de Trabajo en función de la distribución de tareas decidida por el propio Secretariado.
Como criterio general hay que considerar que cada Área debe cubrir las necesidades que su actividad genera, tomar iniciativas que respondan a las demandas o adelantarse a las mismas, planificar su trabajo, aplicarlo y proponer una evaluación. Las personas responsables de las Áreas de Trabajo deberán trabajar en equipo con el objeto de resolver
cuestiones técnicas y aliviar así a los órganos.
Las funciones comunes a todas las Áreas del Secretariado Confederal son:

- presentar un informe con la planificación del trabajo anual;
- valoración y balance de esta planificación y de los objetivos planteados;
- estudio, elaboración de propuestas, análisis e información;
- apoyo informativo a cada uno de los sindicatos confederados si así se demanda, y solicitud de información para configurar criterios y posiciones comunes.

En todo caso, como norma general todas las actuaciones de las personas con tareas federales se hayan supeditadas a lo que indiquen los órganos respectivos.
Por otro lado, el Secretariado tiene capacidad para elegir de entre sus miembros titulares o suplentes a personas para realizar tareas concretas de representación.
El Secretariado Confederal es el órgano que recibe los informes de los sectores, que conoce su actividad y que remite al Pleno Confederal las decisiones, en su caso, sobre los mismos. Todo ello sin perjuicio de las atribuciones que sobre el particular tiene el propio Pleno Confederal, y de la autonomía de los propios sectores organizados para dirigirse al mismo.
El Secretariado Confederal también ha de ser el instrumento confederal de vinculación con los territorios, es decir, el ámbito orgánico donde se facilite directamente la relación entre el sindicato confederado y la Confederación, y donde esa relación se enriquezca yendo más allá del mero intercambio de información.
La definición hecha no impide que en ocasiones el Secretariado Confederal pierda todo viso de efectividad desde el momento en que se reúne una vez por trimestre. Mientras, en la realidad que nos rodea, los acontecimientos fluyen al margen de nuestros plazos. La gravísima consecuencia de esta situación es una separación de planos de realidad entre el órgano y lo cotidiano, de resultas que en el SC o discutimos del pasado o nos introducimos en un bucle anticipatorio a largo plazo que acaba bloqueando el órgano.
De lo anterior resulta que el verdadero poder (en el buen sentido de la palabra) confederal reside por un lado en los órganos sectoriales (que en más de una ocasión se exceden, o no tienen más remedio que excederse, en sus competencias) o bien en las personas responsables de algunas Áreas de trabajo, que improvisan sin más remedio, y que seguro que se exceden también (contra su voluntad, sin duda).
La solución no debe pasar ni por la creación de un órgano intermedio, ni por la redefinición de otros (la Comisión de Coordinación y el mismo Secretariado). La propuesta es que el Congreso autorice el funcionamiento de una Comisión de Áreas, dependiente del Secretariado, sin poder ejecutivo, y formada por las personas responsables de cada una de las áreas definidas. Esta comisión sólo actuaría en situaciones de urgencia que el Secretariado no pudiera abordar.

4. La Comisión de Coordinación.
A las personas que integren la Comisión de Coordinación, a partir de lo establecido en los Estatutos Confederales, se les reconoce la capacidad de representación política de la Confederación en ausencia del Secretariado Confederal o por mandato de este, así como la de elevar propuestas de trabajo al citado órgano, del que depende.
Asimismo la CC debe tener las competencias necesarias, siempre ajustadas por el Secretariado Confederal, para realizar un seguimiento efectivo de los acuerdos adoptados en los órganos confederales. La CC tiene la capacidad de tomar iniciativas siempre y cuando las circunstancias lo impongan. En este caso, es preceptiva la consulta con, y conformidad de, las personas responsables de las Áreas de Trabajo afectadas. Bastará la petición de un área de trabajo para que sea la Comisión de Áreas la que actúe.

El Congreso autoriza al Secretariado Confederal a adscribir a la CC, de manera transitoria, a personas liberadas para tareas centrales. Para esta adscripción es preceptivo el acuerdo con el sindicato de origen, así como la disposición, si en algún momento se requiere, de estas personas para desarrollar sus tareas en la sede central de la Confederación.

5. Entidades y asociaciones vinculadas a la Confederación Intersindical.
El Congreso Confederal acuerda iniciar un estudio de viabilidad para la creación y regulación del funcionamiento de entidades o asociaciones relacionadas con los fines y las características de la Confederación.

Ponencia de Carta Económica

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0. OBJETIVOS.
a) Mantener la estructura organizativa de la Confederación Intersindical y garantizar el funcionamiento de sus órganos.
b) Posibilitar la pertenencia a estructuras o plataformas supraestatales, por mandato estatutario o por decisión orgánica.
c) Consolidar y expandir nuestro modelo sindical en aquellos ámbitos donde estatutariamente se decida.
d) Desarrollar actividades en consonancia con el carácter socio-político de la Confederación Intersindical.
e) Garantizar la solidaridad entre los diferentes sindicatos confederados que minore los posibles desequilibrios territoriales en la acción sindical.

1. CRITERIOS GENERALES DE ORGANIZACIÓN ECONÓMICA.
a) La Confederación Intersindical, en cumplimiento de la legislación vigente, tendrá un plan de cuentas adaptado al Plan Contable aplicable a las entidades sin ánimo de lucro (Real Decreto 776/1998, de 30 de abril, por el que se aprueban las normas de adaptación del Plan General de Contabilidad a las entidades sin fines lucrativos y las normas de información presupuestaria de estas entidades). En los libros contables oficiales y, en su caso, auxiliares se registrarán los ingresos y los gastos, así como el estado patrimonial de la Confederación Intersindical.
b) La gestión económica de la Confederación Intersindical corresponde al Secretariado Confederal, que podrá delegar sus funciones en un equipo de trabajo formado por, al menos, un miembro del Secretariado Confederal, que será el responsable de finanzas, y una persona de la Comisión Coordinadora.
c) El Secretariado Confederal presentará para su aprobación por el Pleno Confederal el balance del ejercicio cerrado (situación, sumas y saldos e ingresos y gastos) y su memoria explicativa con el suficiente detalle para justificar las propuestas contenidas en la propuesta de presupuesto presentada al Pleno para el ejercicio corriente.
d) El presupuesto anual, incluida la actualización de las cuotas de afiliación, será igualmente aprobado por el Pleno Confederal a propuesta del Secretariado Confederal. Las posibles modificaciones del mismo deberán, asimismo, ser aprobadas por el Pleno Confederal a propuesta del Secretariado Confederal.
e) El presupuesto debe recoger el superávit del año anterior, si lo hubiere, que pasará a formar parte de un Fondo de Reserva para afrontar situaciones de iliquidez y extraordinarias y no presupuestadas.
f) Ordinariamente, el presupuesto contemplará una dotación a un Fondo de Elecciones, con destino finalista.
g) La dotación de ambos fondos, de reserva y de elecciones, figurarán dentro del presupuesto.
h) El presupuesto proveerá las cantidades necesarias para enjugar o hacer frente al eventual déficit generado en ejercicios anteriores.
i) La Confederación Intersindical tendrá tantas cuentas bancarias operativas como estime oportuno. Así mismo, podrá realiza las actividades económicas que estime oportunas, si las mismas son aprobadas por el Pleno Confederal o, en su caso, por el Secretariado Confederal cuando no suponga incremento de gasto o variación patrimonial, y siempre previo
informe del responsable de economía.

2. DE LOS INGRESOS Y SU DISTRIBUCIÓN.
La Confederación Intersindical contará con los siguientes ingresos:
1.- Las cuotas de afiliación de las organizaciones confederadas, que podrán y deberán ser actualizadas y aprobadas con cada presupuesto anual e ingresadas en las cuentas de la Confederación a lo largo del segundo mes del semestre correspondiente.
2.- Las cuotas que se fijen en cada caso para los sindicatos que tengan establecida carta de relaciones.
3.- Las subvenciones públicas concedidas a la Confederación para financiar su acción sindical, su presencia institucional o actividades concretas en ámbitos territoriales superiores al de cada uno de los sindicatos confederados.
4.- Las subvenciones del Ministerio de Trabajo concedidas por suma de representatividad de cada uno de los sindicatos miembros, que podrán ser repartidas parcial o totalmente por acuerdo del Pleno Confederal previa petición razonada de la responsabilidad confederal de finanzas entre éstos en proporción a la representatividad obtenida por cada uno de ellos.
5.- Los remanentes de las actividades de formación y similares que se organicen por el Secretariado Confederal, si los hubiere.
6.- Las posibles donaciones, que serán gestionadas por el Secretariado Confederal, una vez hayan sido aceptadas por el Pleno Confederal, salvo las que se produzcan a beneficio de inventario, en cuyo caso podrán ser aceptadas directamente por el Secretariado.
7.- Los ingresos que se deriven de los servicios prestados por la Confederación Intersindical o bien por la venta de distintos productos diseñados para financiar campañas tanto de acción sindical como electorales.
8.- Las rentas, intereses o beneficios de capital provenientes de las actividades económicas que, de acuerdo con la legislación vigente, pueda realizar la Confederación como organización sindical.
9.- Los ingresos o compensaciones de gastos provenientes de la actividad del Secretariado Confederal o de las personas que actúen en representación de la Confederación Intersindical.

3. CUOTA CONFEDERAL.
a) El Secretariado propondrá anualmente al Pleno Confederal las cuotas necesarias para cubrir los gastos previstos en el presupuesto correspondiente y, en su caso, enjugar el posible déficit del ejercicio anterior, que no podrá ser cubierto a cargo de fondos de reserva específicos para otros gastos.
b) La cuota se revisará y actualizará con carácter anual, con el firme objetivo de incrementar paulatinamente el peso porcentual de las cuotas por afiliación en el total de los ingresos confederales ordinarios.
c) El ingreso de la cuota se realizará en sendos pagos semestrales (dentro del segundo mes del semestre) a fin de evitar gastos de gestión innecesarios y garantizar la necesaria liquidez financiera confederal.
d) En aquellos casos en que alguno de los sindicatos confederados no pudiera coyunturalmente afrontar con puntualidad sus obligaciones de pago con la Confederación, habrá de comunicarlo por escrito a los órganos de la misma para consensuar y temporalizar los mecanismos de liquidación de dicha deuda.
e) El incumplimiento continuado de las obligaciones en la cotización de las cuotas, generará limitaciones en el pleno derecho de participación en los órganos y las actividades confederales que se determinarán en los correspondientes reglamentos orgánicos.
f) El Pleno podrá aprobar cuotas extraordinarias cuando se justifiquen por urgencias de equipamiento o de satisfacción de gastos extraordinarios, quedando expresamente excluidas las razones derivadas de la gestión de los gastos ordinarios.
g) Para aquellos sindicatos que soliciten integrarse en las estructuras de la Confederación Intersindical, se arbitrarán mecanismos de carácter transitorio que favorezcan el cumplimiento de sus obligaciones respecto al ingreso de la cuota confederal.

4. DE LOS GASTOS Y SU ASIGNACIÓN.
Los gastos que, salvo modificación por parte del pleno confederal, como mínimo se han de atender desde el presupuesto confederal, serán los siguientes:
1.- Los gastos corrientes de mantenimiento, funcionamiento e infraestructuras de la sede confederal.
2.- Los gastos de organización e infraestructura de las actividades confederales.
3.- Las compensaciones económicas que se acuerden por el Pleno Confederal para cada uno de los miembros de la Comisión Coordinadora, según cada caso particular.
4.- Las cantidades que se establezcan para desplazamientos, comidas y pernoctas de las personas que sean miembros de los órganos confederales para asistir a reuniones de los mismos.
5.- Los desplazamientos, comidas y pernoctas con ocasión de acudir a reuniones o actividades en representación de la Confederación.
6.- Los desplazamientos, comidas y pernoctas para asistir a reuniones o actividades no orgánicas, siempre que sean expresamente aprobadas por el Secretariado Confederal, el Pleno Confederal o el Congreso de la Confederación Intersindical.
7.- La asesoría jurídica y los costes derivados de los recursos y apelaciones a los Tribunales de Justicia que el Secretariado Confederal considere necesario interponer o efectuar.
8.- Las campañas confederales y actividades sociopolíticas realizadas por la Confederación o en las que decida colaborar, en su totalidad o en el porcentaje que determinen sus órganos.
9.- Las relaciones internacionales, tanto en lo que se refiere a cuotas como a participación en reuniones o actividades, conjuntas o bilaterales, con otras organizaciones sindicales.
10.- Las ayudas a los Sindicatos confederados para su consolidación y extensión, así como la reversión total o parcial por acuerdo del Pleno Confederal a los Sindicatos confederados de las subvenciones obtenidas por su representatividad.
11.- Las compensaciones que se establezcan para hacer frente a las situaciones derivadas de accidentes que se produzcan en desplazamientos para asistir a reuniones confederales o representando a la Confederación.
12.- Las inversiones o gastos ordinarios o extraordinarios aprobados por el Pleno Confederal a propuesta del Secretariado Confederal.
13.- El 1% del total de los ingresos, destinado a proyectos de solidaridad.
14.- El Fondo de Reserva, que se nutrirá del posible superávit que origine cada ejercicio. Este fondo estará dedicado prioritariamente a garantizar la solvencia económica de la Confederación Intersindical en situaciones extremas o a la adquisición de patrimonio, pero nunca servirá para enjugar el déficit. Cuando éste exista, se dotará de una partida específica que permita enjugarlo.
15.- El Fondo de Elecciones, que tendrá una planificación cuatrienal.

5. CRITERIOS ECONÓMICOS DE GASTO.
Desde hace años, la Confederación viene aplicando unos criterios en el pago de dietas para asistencia a reuniones y actividades diversas, que establecen en algunos casos la corresponsabilidad en los gastos entre las arcas confederales y las de cada sindicato miembro. Dicha situación, cuyo planteamiento debería ser coyuntural, ha adquirido carta de naturaleza.
Uno de los desafíos para las finanzas confederales es la asunción de dichos gastos en su totalidad, sin distinguir la modalidad de la actividad a realizar ni la situación geográfica o coyuntural de las personas asistentes. Ese objetivo sólo podrá ser afrontado a medio plazo y en virtud de un incremento de los ingresos que posibilite el correspondiente aumento en los gastos que supone, máxime en un momento en que la modificación de los órganos de la Confederación para garantizar una mayor participación sectorial hará necesarias más reuniones orgánicas al cabo del año.
1.- Gastos de Secretariados, Plenos y reuniones de áreas y de la Organización de Mujeres, tanto sectoriales como intersectoriales: hasta que se alcance el objetivo de la asunción completa de los gastos por la Confederación, se revisarán y establecerán anualmente las dietas de kilometraje, alojamiento y manutención, del mismo modo que se hace con la cuota por afiliación.
2.- Igualmente, se revisarán anualmente las dietas, indemnizaciones y recursos materiales que serán dispuestos a disposición de quienes realicen tareas confederales o asistan a reuniones y actividades en representación de la Confederación Intersindical. Por su especificidad, los gastos e indemnizaciones generadas por la Comisión Coordinadora serán revisados y cuando proceda actualizados también anualmente.
3.- Como compensación económica, los sindicatos cuyo territorio esté fuera de la península percibirán el importe íntegro del pasaje de vuelo contra entrega de justificante.
4.- En todos los casos, deberán cumplimentarse los estadillos correspondientes y entregarse las facturas y justificantes de gasto por los conceptos financiados.
5.- La asistencia a jornadas y escuelas sindicales serán financiadas por la Confederación. Con carácter general, y salvo que se determine otra cosa por los órganos confederales en cada actividad concreta, se garantizará la asistencia de medio pleno (confederal o sectorial, en su caso), entendiendo que todo gasto efectuado por encima de lo previsto (habitación individual, más días de alojamiento, abono de reservas no ocupadas…) realizado por una delegación será asumido por el sindicato correspondiente.
6.- La organización y asignación de recursos para estas actividades se realizará en colaboración con el sindicato anfitrión. Su realización siempre estará condicionada a la presentación y aprobación de un proyecto de presupuesto que especifique la disponibilidad de ingresos y la previsión de gastos, que incluirán igualmente los gastos de materiales a emplear.
7.- En los viajes al extranjero se pagarán los gastos reales, tanto de desplazamiento como de manutención y alojamiento, siempre previa presentación de presupuesto y posterior factura de cada viaje al Secretariado Confederal.
8.- Los gastos por campañas y edición de materiales deberán expresar, previamente a su aprobación por el Secretariado Confederal, un presupuesto de costes, de forma que pueda determinarse la asunción en su totalidad o de forma parcial del gasto por las finanzas confederales. La persona responsable de la gestión económica de la Confederación comunicará a las personas responsables de las economías de las Organizaciones Confederadas los compromisos que por campañas y publicaciones tengan que asumir por acuerdos adoptados por los órganos confederales competentes.
9.- Todas las actividades reseñadas en los epígrafes anteriores deben estar contempladas necesariamente en las Líneas Confederales que planifican la acción sindical anual y que son aprobadas por el primer Pleno Confederal del año, a propuesta del Secretariado Confederal y de los responsables de cada sector, subsector, área o de la Organización de Mujeres. Así pues, deberán estar detallados todos los gastos (viajes, reuniones, relaciones internacionales, jornadas, campañas, materiales…) y los ingresos (cuotas, subvenciones…) previstos, tanto los de carácter general como los correspondientes a las actividades específicas de cada Sector, Área o de la Organización de Mujeres. Toda actividad o iniciativa que no esté planificada y por tanto presupuestada previamente, será considerada extraordinaria, y en cada caso deberán plantearse los mecanismos de financiación y ejecución. Si en un Sector, un Área o en la Organización de Mujeres se proponen cambios en la distribución de sus partidas de gasto, éstas podrán ser modificadas, previa comunicación al Secretariado Confederal y su visto bueno, siempre que esto no suponga un aumento en el total anual asignado a los gastos específicos de dicho Sector, Área o a la Organización de Mujeres.

6. SOLIDARIDAD ENTRE SINDICATOS.
a) Dada la situación diversa y heterogénea en la implantación de nuestro modelo sindical en los distintos territorios donde está presente la Confederación Intersindical, el presupuesto contemplará una partida destinada a la concesión de ayudas económicas de carácter anual a aquellos sindicatos que lo soliciten tanto para la extensión como para la consolidación de la acción sindical desde el punto de vista territorial como sectorial.
b) Aquellos sindicatos que soliciten ayuda para su funcionamiento deberán presentar ante el primer Pleno Confederal del año solicitud fundamentada, acompañada del proyecto de presupuestos anual y balance económico del año anterior de su gestión económica.
c) Los sindicatos receptores se comprometen a ir disminuyendo la cuantía de su petición de forma que no se convierta en un subsidio permanente. Para ello, podrán solicitar la asesoría del área de finanzas confederal con el fin de arbitrar planes conjuntos con dicho fin, en busca de la necesaria solidez financiera.
d) Para ser efectiva, la ayuda concedida habrá de ser librada al sindicato receptor a la mayor brevedad, y a ser posible de una sola vez.
e) La concesión de esta ayuda económica puede ir acompañada en cada caso, si así lo estima el pleno, de la exención parcial o total en determinados gastos relativos a la edición y remisión de materiales confederales, e incluso al abono íntegro de los gastos de desplazamiento y pernocta a reuniones y actividades de la Confederación. En ningún caso dicha exención exonerará del pago de la cuota por afiliación.

7. DISPOSICIÓN TRANSITORIA.
Los criterios que marca la presente Carta Económica serán de aplicación a partir del 1 de enero de 2013.

Ponencia de Política Sindical

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Cuatro años de Confederación Intersindical en el contexto de la crisis

Introducción.
El IX Congreso de la Confederación Intersindical estableció la necesidad de coordinar la acción sindical en los nuevos sectores y trabajar conjuntamente con el Sindicato Ferroviario, integrando las distintas realidades territoriales sin dejar de ser una confederación de sindicatos soberanos en el territorios. Con toda seguridad ha sido la inercia la que ha propiciado que las siglas y actuaciones de la Confederación Intersindical prácticamente no sean visibles sino hasta el presente año, figurando STEs-Intersindical en la mayoría de los anteriores.
La acción sindical ha venido marcada por las líneas establecidas en el IX Congreso y que se centran en diversos ejes como precariedad laboral, defensa de los servicios públicos, retribuciones dignas, reparto del trabajo, conciliación de la vida personal, familiar y laboral, democracia y derechos sindicales , salud laboral o movimientos sociales, pero adaptándose a la nueva y cambiante situación generada por la crisis.
Si bien estos cuatro años de andadura han venido marcados por la crisis y la reforma del mercado laboral y las pensiones, temas ambos de suficiente importancia para marcar una línea de acción sindical, otros asuntos de actualidad han sido motivo de comunicados o manifiestos de la CI, acordes a nuestra línea de defensa de defensa de las lenguas, la escuela pública, la salud laboral, la igualdad entre mujeres y hombres, la repulsa a la violencia machista o a los atentados de ETA.
Igualmente la CI mostró su rechazo a las acciones armadas indiscriminadas y desproporcionadas de Israel sobre la franja de Gaza y sus población civil, participando en diferentes movilizaciones en los territorios y denunció el genocidio contra la población en lucha en defensa de la selva amazónica y se sumó a las organizaciones peruanas que responsabilizaron al Gobierno y al Congreso de la República de las muertes.
La CI también se mostró al lado del SAT exigiendo que termine la represión sindical de Estado a las organizaciones sindicales de clase y contra sus dirigentes y militantes. La persecución a la libertad sindical en Turquía, la defensa del pueblo saharahui, la repulsa a la explotación sexual de las mujeres y menores o la defensa del derecho al aborto seguro y gratuito, han sido otros de los muchos temas objeto de manifiestos, comunicados o acciones de la Confederación Intersindical.
Por último, la aparición del movimiento 15M, Democracia Real en mayo del 2010, derivado ha merecido el apoyo y solidaridad de la CI.

La crisis.
"Los ricos gobiernan un sistema mundial que les permite acumular capital y pagar el menor precio posible por el trabajo. La libertad resultante solo la obtienen ellos. Los muchos no tienen más remedio que trabajar más duro en condiciones cada vez más precarias para enriquecer a los pocos. La política democrática, dirigida al progreso de la mayoría, está realmente a merced de esos banqueros, barones mediáticos y otros magnates que dirigen y poseen todo"
Charles Moore,
Biógrafo de Margaret Thatcher
Extracto del artículo "Estoy empezando a pensar que la izquierda en realidad tiene razón", The Telegraph, 22 de julio de 2011

Escenario mundial: la crisis de la civilización.
La actual crisis económica y financiera internacional tiene su origen en el sistema capitalista y sus valores, es la crisis de una sociedad basada en el consumo que amenaza el tejido social y el bienestar de las personas y se superpone a otras crisis: ética, de equidad, porque frente a las grandes ganancias el nivel de pobreza aumenta, ecológica, alimentaria (más de 33 países en el mundo corren el riesgo de hambruna). Que acentúa la división sexual del trabajo y las desigualdades, es también una crisis de cuidados, porque el recorte del gasto público en políticas sociales repercute directamente en las mujeres, principales encargadas de los cuidados a descendientes y a personas en situación de dependencia.
La crisis económica, financiera, ecológica y social se mezclan y retroalimentan. Esta crisis mundial del capitalismo demuestra el estancamiento del desarrollo sobre la base de compartir con desigualdad la riqueza producida, la desregulación financiera, el libre comercio y el desprecio generalizado por el medio ambiente y la ecología.
Nace en los países desarrollados y ha supuesto cambios en el poder financiero a escala internacional. La creciente des localización de empresas, el desplazamiento de la producción de servicios e industria desde Estados Unidos a la Unión Europea, Corea y China o el sudeste asiático, comporta que gran parte de la deuda de EEUU esté en manos de China, que ha visto que cinco de sus bancos figuren en el ranking de los diez más importantes a nivel mundial. El origen de la crisis económica radica en el grave deterioro de las relaciones sociales y en particular en la relación entre capital y trabajo. A mediados de la década de 1980 sobre la base de derrotas de la clase trabajadora, del aumento de la precariedad laboral y el desempleo (incluso en las épocas de crecimiento económico el paro alcanzaba al 24% de la población) , se pone en marcha una nueva moda de gestión empresarial, cuyo objetivo es "crear valor para los accionistas", es decir, la recuperación continua del precio de las acciones en el mercado bursátil y dividendos crecientes. La inversión empresarial se estanca y las indemnizaciones a empresarios les sitúa al lado de los grandes accionistas a través de bonificaciones.
En los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico ( OCDE), la falta de inversión de las ganancias y de control público sobre las instituciones financieras provoca la desregulación de los mercados financieros, organizada por los sucesivos gobiernos desde la década de 1980 y acaba con la globalización neoliberal que ha agravado aún más la crisis social. Este proceso se acompaña con el libre comercio, naciendo en 1994 la Organización Mundial del Comercio (OMC).
En esta nueva configuración, las corporaciones transnacionales (FTN) juegan un papel clave en la estructuración del comercio internacional y representan más de la mitad del comercio entre los países de la OCDE y un tercio del comercio mundial . Comercio "fuera del mercado" difícil de controlar por las autoridades públicas. Estas corporaciones crean estructuras en todo el mundo, lo que facilita la flexibilidad de sus operaciones. Fragmentando el proceso de producción mediante la localización en países donde los costos son mínimos. Se enriquecen a base de la precariedad laboral, la falta de fiscalidad, la salud de las trabajadoras y trabajadores o el deterioro del medio ambiente.
Esta globalización del comercio de bienes se ha traducido en el cambio de la división internacional del trabajo, con el traslado de una parte importante de puestos de trabajo industriales de Europa y los EEUU y la especialización de la producción de bienes para la exportación hacia el Sur, en detrimento del desarrollo dentro de ellos.
El comercio mundial está dominado por la Unión Europea, Estados Unidos, Canadá, Japón y Australia. La importante expansión del mercado interior y la falta de fiscalización, han creado las condiciones idóneas para el dumping social, fiscal y ambiental. El libre comercio, junto con la desregulación financiera y la libertad de movimiento de capital, tiene una incidencia directa en la precariedad laboral y la bajada de los salarios en todo el mundo, muy en especial en las mujeres.
La aplicación del capitalismo neoliberal ha ido acompañada de una tutela de la democracia con la voluntad de privar a la ciudadanías de las decisiones políticas. En la mayoría de países europeos, los problemas sociales son utilizados de forma demagógica y electoralista para reforzar una política de control de la seguridad, reduciendo las libertades civiles y lanzando mensajes de desesperación social que están sirviendo para que prospere la extrema derecha. En la primera fase, la crisis "subprime" se transformó en crisis financiera y generalizada del sector bancario. La inyección masiva de dinero público en el sistema financiero logró contenerla en un primer momento. La segunda fase convirtió la crisis financiera en una grave recesión económica, más acentuada en la Unión Europea, donde los planes de recuperación de los diferentes gobiernos ha supuesto el 1,5% del PIB, muy por debajo de lo implementado en EEUU. La segunda fase de la crisis puso nuevamente de relieve el spoiler del capitalismo financiero: mientras que la financiación pública ha de salvar a los bancos asfixiados por sus excesos especulativos, los gobiernos están poniendo en práctica planes de austeridad con el pretexto de tranquilizar a estas instituciones financieras.
Actualmente hemos entrado ya en la tercera fase, articulada por el déficit presupuestario derivados de la deuda pública. En EEUU, la quiebra del banco de inversión Lehman Brothers en septiembre de 2008 y las turbulencias bancarias que le sucedieron pusieron de manifiesto la fragilidad del sistema financiero global. Ante esta situación, y la amenaza de un fuerte contagio a la economía real, los gobiernos de las principales economías anunciaron diferentes planes de rescate para salvaguardar sus sistemas bancarios.
Los planes de rescate a la banca privada — un tercio del PIB mundial de 2009- no han conseguido reactivar el consumo ni la inversión privada. El desempleo sigue aumentando y la producción en la Unión Europea, EEUU o Japón se paraliza porque no se tiene acceso al crédito. Las ayudas públicas no han garantizado el control de las financieras. Sólo han contribuido a una mayor concentración de la economía, más desempleo y menos demanda. Los niveles de endeudamiento público no se habían dando nunca, salvo en tiempo de guerra. Las financieras y bancos americanos no han aprendido nada con esta crisis que ellos mismos han provocado. Se sigue sobre explotando recursos naturales y humanos en un intento de abaratar al máximo los costes directos o indirectos de la mano de obra a cargo de fondos públicos y creando las condiciones ideales para entrar en competición con las empresas asiáticas.
Las políticas fiscales no vienen definidas por motivos económicos, sino políticos. Las rentas del capital gravan menos que las del trabajo con la excusa de que se así se incentiva la creación de empleo. La realidad es que la crisis la siguen pagando quienes menos culpa tienen. Pero sus culpables, la banca y los grandes especuladores, se enriquecen a costa de la precariedad laboral, de la bajada de los salarios, de la privatización de los servicios públicos. El sistema capitalista nos quiere vender medidas neoliberales como las únicas que nos pueden ayudar a salir de ella.
En los mercados, las empresas más pequeñas son expulsadas y los sectores dominados en su mayoría por PYMES se resienten. Miles de trabajadoras y trabajadores ser ven abocados al desempleo, lo que supone un aumento del gasto social. Si este gasto social no va acompañado de medidas fiscales que garanticen ingresos suficientes al estado, crecerá la especulación financiera. En el 2009, las bolsas del mundo experimentaron una subida que supuso un récord de ganancias superior al del 2007. Pero estas ganancias provenían de la inversión especulativa, no de la producción. Las fusiones de empresas agudizaron la recesiónactual, pues los precios de los productos básicos como energía o alimentación siguen subiendo. Se destruye empleo y se frena más la demanda.
La suspensión de pagos de los estados, como ha ocurrido en Grecia, Islandia, Portugal e Irlanda, anuncian una nueva crisis financiera. Y es sólo el principio. Amenazan con seguir este camino otros estados de la Unión Europea, entre ellos España. Una crisis fiscal de graves consecuencias a nivel mundial, ya que según el Fondo Monetario Internacional queda por aflorar el 50% de los activos "basura" de la banca mundial.

La realidad de la crisis en el estado español y primeras medidas del gobierno del Estado.
En el estado español la economía se ha basado sobre la construcción y la especulación inmobiliaria. La década pasada la sobre dimensión del sector de la construcción hizo crecer al sector inmobiliario y la escalada de precios de la vivienda. La burbuja inmobiliaria infló los precios de las casas generando una tendencia especulativa, algo que no se pudo contener hasta la llegada de la crisis económica en 2008. Se apostó por la urbanización de la periferia de algunas ciudades, la construcción de nuevas zonas residenciales. Los precios de la vivienda continuaban subiendo conjuntamente al nivel de endeudamiento de las familias que se embarcaron en hipotecas para comprar viviendas, en muchos casos segunda residencia. La crisis que se arrastraba desde el 2007, llevó a una fuerte caída de la demanda. En la actualidad existen más de 1.200.000 viviendas desocupadas, miles de viviendas inacabadas y urbanizaciones desiertas. Es impensable su demolición o recuperación. Las familias se encuentran con pagos hipotecarios inasumibles de una vivienda que en muchos casos se queda el banco.
La falta de una planificación urbanística inmobiliaria, la cultura del asfalto que ha llevado a urbanizar indiscriminadamente nuestro litoral -con el consiguiente deterioro del medio ambiente- la burbuja inmobiliaria y el endeudamiento de la población en aras de adquisición de segunda residencias, nos han llevado a la actual crisis, con las características de desempleo, baja productividad del mercado laboral, precarización...
Más de la mitad de empresas desaparecidas en el año 2009 eran de construcción. La crisis del sector inmobiliario afecta directamente al sistema financiero. El aumento de morosidad en el pago de hipotecas, la falta de ingresos del sector público y el nivel de endeudamiento junto con la falta de confianza de los mercados financieros hacia la deuda española, han situado al estado español en una situación muy complicada.
La creación del Ministerio de Vivienda correspondió al doble objetivo del ejecutivo de investigar la corrupción urbanística (como el caso Malaya) y frenar la burbuja inmobiliaria, facilitando el acceso de las familias y la juventud a la vivienda. Se propuso la construcción de los minipisos de 30 metros, para facilitar el acceso a la vivienda de la juventud, medida totalmente ineficaz. En 2008 se aprueba la Renta Básica de Emancipación, que contempla una ayuda de 210 euros mensuales para el pago del alquiler dirigida a jóvenes de entre 23 y 30 años y se crea también el Plan Estatal de Vivienda y Rehabilitación.
Pero no sólo el sector de la construcción ha derivado en esta crisis. La caída de las PYMEs comporta un rápido aumento del desempleo y la consiguiente disminución de la demanda de mano de obra. En cuanto al trabajo por cuenta propia, se cierran más de 6.000 negocios autónomos y 32.720 personas se dan de baja en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos en los primeros nueve meses del 2008, año en el que comienza también el goteo de empresas como T-Systems Iberia, Telefónica , Opel, Lladró , Ford, por citar sólo algunas de ellas, que presentan expedientes de regulación de empleo (EREs). Una caída que el Ejecutivo no consigue frenar con la rebaja del impuesto de sociedades en cinco puntos durante tres años para aquellas Pymes con plantillas de menos de 25 personas y un volumende ventas inferior a 5 millones de euros.
Así, después del "boom" inmobiliario, la caída posterior de las ventas en el año 2008 va a desencadenar la suspensión de pagos de numerosas empresas. La mayor de ellas en toda la historia del estado español, Martinsa-Fadesa, con un pasivo de 4.000 millones de Euros. Grandes empresas como Hábitat o SEOP le siguen en la lista del ranking de suspensiones de pagos.
El nivel de endeudamiento de las administraciones públicas y las empresas privadas, el aumento del paro o la falta de tejido industrial, ha hecho que la crisis en el estado español sea diferente al resto de las de los demás países europeos. Las medidas neoliberales no han hecho sino agudizar más los efectos de esta crisis.
El Banco de España ha sido cómplice de la banca privada, ocultando la realidad de la crisis.
La implantación del neoliberalismo nos lleva a padecer las consecuencias peores en esta crisis. Los efectos de la crisis también afectan al sistema financiero español por el impago de las deudas, pero también por la mala gestión y especulación de las entidades. El estado interviene diferentes entidades financieras y empiezan los planes de rescate de la banca.

Cuatro años de la Confederación Intersindical en la realidad social de la crisis y las medidas del Ejecutivo.
Recién inaugurado el 2008, la Confederación Intersindical solicita a la Ministra de AAPP la convocatoria Mesas Sectoriales Educación, Sanidad y Justicia, ya que en algunas autonomías y Ministerios se daba la circunstancia que sindicatos con una representación cercana al 25% en determinados sectores, mayoritarios en otros, se vieron excluidos de la negociación. Ante las elecciones generales de marzo, la Confederación Intersindical realiza un comunicado recordando la importancia de la política social y económica en temas que afectan directamente al día a día de la ciudadanía, como es la precariedad laboral o el paro, los servicios sociales, la dependencia, la lucha contra la discriminación salarial de las mujeres, la violencia machista, el derecho a una vivienda digna o la salud laboral. Recordaba también el pluralismo de la sociedad frente al pensamiento único o el bipartidismo y la necesidad de defenderla a la hora de expresar el voto. Una vez celebradas las elecciones, la Confederación Intersindical pide al nuevo gobierno que tome medidas que beneficien a las personas trabajadoras y potencien las libertades públicas.
El día 2 abril, en la sede europea de la Internacional de la Educación de Bruselas, la presidencia del Comité Paneuropeo de la Internacional de la Educación recae en una la Confederación de STEs, en un merecido reconocimiento del trabajo desempeñado por la Organización de Mujeres.
En el sector de Justicia, en el País Valenciano y en el ámbito de las competencias del Ministerio , se mantuvo una huelga durante dos meses que acabó con la firma de un acuerdo entre el Ministerio y los sindicatos CCOO y UGT, al margen de la voluntad del personal en lucha por la equiparación salarial con otros territorios, en contra de la unidad sindical y de la toma de decisiones de trabajadoras y trabajadores. La Confederación Intersindical hacía un llamamiento a las personas que creen en otra alternativa sindical autónoma y asamblearia.

Las directivas de la vergüenza y de las 65 horas semanales.
En la primavera de 2008, con la crisis en ciernes, la atención mediática y sindical se volcó en dos directivas europeas aprobadas inicialmente por la Comisión, que finalmente fueron aprobadas con un contenido rebajado. Sin embargo, a la vista de los posteriores acontecimientos, en particular en el Estado español, el programa contenido en aquellas sigue alimentando las medidas de los gobiernos por toda Europa.
La llamada "Directiva de la vergüenza" , oficialmente "del retorno", establecía un plazo máximo de detención de 18 meses a las personas emigrantes, permitiendo que una autoridad administrativa, no un juez o jueza, quien decida su detención en Centros de Internamiento de Extranjeros (como en Guantánamo) antes de su expulsión, y permitía también la detención y expulsión de los menores no acompañados pudiendo ser devueltos a países con los que Europa o alguno de sus estados miembros mantenga acuerdos de colaboración, sin necesidad de que sea el país de procedencia del menor, y sin garantizar que serán sus familiares o tutores legales quienes se harán cargo de él. Los límites de la Directiva eran tan amplios que devenían una desregulación casi total, que no solo permite a los estados hacer lo que quieran en este ámbito, sino que justifica las políticas neoconservadoras de los gobiernos europeos.
En cuanto a la directiva de las 65 horas, posibilitaba la ampliación de la jornada laboral en Europea hasta las 65 horas, condenando a los trabajadores y trabajadoras a incrementos de jornada, nuevas formas de precariedad y nuevas formas de flexibilidad laboral. Además, contenía la idea de que "el mismo trabajador debe negociar directamente con el empresario", en un intento de destruir el principio de negociación colectiva, de desactivar los sindicatos como fuerza que contrarresta la desigual relación entre ambos estamentos, y de destrucción de los derechos que tantas luchas habían costado.
La respuesta contra el intento de aprobación de ambas directivas supuso la convocatoria múltiples concentraciones y movilizaciones. También la Confederación Intersindical participó en el III Foro Mundial sobre Migraciones celebrado en Madrid , que acabó con una manifestación convocada contra el levantamiento de muros físicos, jurídicos y sociales que impiden la libre circulación de personas.
En algunos territorios, como Aragón, Madrid y País Valenciano, fue el motivo para la constitución de plataformas estables de lucha contra los efectos de la crisis, para dar una respuesta clara, contundente y unitaria a esta provocación de los burócratas europeos, respuesta que pasa por la convocatoria de movilizaciones y huelgas en el conjunto de los estados europeos para defender los derechos conquistados.

El Ejecutivo frente a la crisis. Primera etapa keynesiana.
Con las primeras señales de la crisis, el presidente del Gobierno del Estado sorprendió a la sociedad con la adopción de ayuda de 400 € para los contribuyentes del IRPF, según él mismo manifestó: "este es el primer Gobierno democrático que devuelve a los contribuyentes lo que han pagado de más." A esta medida la siguieron la concesión de la ayuda de 420€ para las personas en paro que habían agotado el subsidio, el cheque bebé -ayuda de 2.500€ por nacimiento- , las ayudas para la compra de coche o la ayuda para alquiler. Todas estas medidas fueron aplaudidas por una sociedad que vivió el espejismo de un supuesto estado de bienestar, aunque hoy la mayoría han desaparecido como el cheque bebé o la devolución de los 400€ del IRPF.
Con el recrudecimiento de la crisis, Zapatero puso en marcha el famoso "Plan E", aprobado en enero de 2009 y cuyo objetivo era contener el crecimiento del paro con obras públicas municipales. Con un carácter keynesiano, esta medida pretendía disminuir los efectos del creciente desempleo, sin embargo el nivel de paro alcanzó el 20%, el doble de la tasa de la Unión Europea. Además, la inversión pública se hizo en un sector masculinizado como es la construcción, al igual que las ayudas al sector del automóvil para incentivar su venta, lo que no ayudó a paliar el ya de por sí mayor índice de paro femenino.
A la ineficacia de las medidas adoptadas, que no consiguieron reanimar la economía, se añadió que su financiación tuvo que hacerse con cargo al déficit y deuda pública, pues con el desplome del mercado inmobiliario se redujo la recaudación fiscal.
Durante la primera fase de la crisis, los sindicatos "mayoritarios" apoyaron al gobierno del Estado cuando anunció su paquete de medidas keynesianas para estimular la economía y garantizar los derechos sociales del estado de bienestar, cumpliendo así la alianza electoral previa por la que el PSOE se mantuvo en línea con ellos, en especial con UGT. Este apoyo fue crucial para la victoria electoral en 2004 y 2008 y garantizó un periodo de colaboración entre gobierno y sindicatos que duró seis años.
La Confederación Intersindical en este año apoya las movilizaciones en diferentes territorios por el Plan Bolonia y la huelga de enseñanza en Murcia, Cataluña, País Valenciano y Asturias. La gripe A y la solicitud de protocolos de actuación fueron otras de las acciones motivo de comunicados.

La reforma laboral.
En el 2010 el gobierno del Estado impone una reforma laboral que va a pasar a la historia como un atentado contra la clase trabajadora. Una reforma que facilita y abarata el despido, generalizando el despido con una indemnización de 33 días por año trabajado y que amplía los motivos para el despido procedente, subvencionando los despidos con fondos públicos. Que establece un fondo de capitalización en el que las propias personas trabajadoras tienen que ser las que ahorren para pagarse su propio despido, la movilidad geográfica o la jubilación. Una reforma que fomenta las agencias privadas de empleo y permite la entrada de las ETTs en las Administraciones Públicas. Que acaba con la negociación colectiva, al establecer la posibilidad de descuelgue de las empresas de los convenios colectivos. La reforma laboral abarata la contratación a la juventud y aumenta el poder de los empresarios, fomentando el contrato basura y dejando en sus manos la modificación unilateral de los salarios y de las condiciones de trabajo, que se podrán modificar sin previo acuerdo y a pesar de lo estipulado en convenio.
En resumidas cuentas, lejos de prevenir el desempleo y la precariedad laboral, favorece los despidos y generaliza la inestabilidad. No pone coto al uso escandaloso de la contratación temporal y permite el lucro privado con las situaciones de necesidad. Ayuda con dinero público al empresariado, que aumenta su poder sobre los trabajadores y trabajadoras, y quiere acabar con la negociación colectiva, única garantía de defensa frente a las pretensiones, nunca satisfechas, de quienes poseen el poder económico.
Reducción un 5% del salario del funcionariado y congelación en el 2011. Congelación de las pensiones y recortes sociales.
En su política de recortes, el ejecutivo anuncia la reducción del 5% del sueldo del personal empleado público, que en general no gana grandes sueldos, por lo que la rebaja supone en la mayoría de los casos una catástrofe en las familias.
Se congelan las pensiones, se suprime la ayuda de 2.500 euros por nacimiento, el conocido como el cheque-bebé, y se recortan las prestaciones de la Dependencia. También la ayuda al desarrollo y la inversión pública son objeto de recortes. Medidas injustas para sectores sociales débiles como las personas jubiladas, las dependientes o las familias monoparentales y que van en detrimento de la sanidad, la educación o la ayuda a los países más necesitados.
Por último, la supresión del Ministerio de Igualdad supuso un importante retroceso en la lucha por la igualdad real y efectiva entre mujeres y hombres y dio al traste con los buenos propósitos de Zapatero al principio de su mandato. La Confederación se manifestó en contra de esta medida, como también algunos territorios.
Todos estos acontecimientos llevan a la convocatoria de huelga el 8 de junio en el sector público, con el consiguiente debate sobre la conveniencia de hacerla extensiva a otros sectores. Finalmente hay unidad de acción en los diferentes territorios y la jornada de huelga se realiza en el sector público. Pero la situación social, con la aprobación de la reforma laboral y el anuncio de la de las pensiones, lleva al planteamiento de una jornada de huelga general. Jornada que se aplaza hasta el 29 de septiembre.
Las movilizaciones del 29S son una manifestación social contra el deterioro de los servicios públicos, contra la precariedad económica que afecta en especial a los sectores más vulnerables, contra unas medidas regresoras que afectan más a quien menos culpa tiene de la crisis, que someten políticamente a la clase trabajadora. En esta situación económica y social es necesaria una respuesta sindical. Ante las medidas ya aprobadas por el gobierno del Estado y las que se anunciaron para los próximos meses, ante el ataque al movimiento sindical arbitrado por los gobiernos, la patronal y las entidades financieras con el beneplácito de algunos medios de comunicación, la Confederación Intersindical entiende que hay que dar una respuesta sindical unitaria, dura y contundente.
Así, a pesar de mantener discrepancias con algunas de las organizaciones sindicales convocantes, por responsabilidad hacia la clase trabajadora, la Confederación Intersindical decide convocar la Huelga General del 29 de septiembre de 2010 y considera necesaria una movilización general y sostenida frente a la reforma laboral, a los recortes sociales y a las medidas anunciadas para los próximos meses.
La Confederación Intersindical ante la convocatoria del 29S se adhiere a la convocatoria europea de lucha de Solidaires, CNT-Francia, TIE-Italia, CGT-España e IAC y participa en las manifestaciones del llamamiento de París: No pagaremos su crisis, convocando y participando conjuntamente a IAC y sindicatos europeos a manifestaciones en Madrid, Barcelona y Bruselas.
La Confederación Intersindical ha estado convocando, en todos los territorios, movilizaciones para forzar al gobierno español a un cambio de política. Por ese motivo y por el rechazo al pensionazo, el 27 de enero de 2011, convocó y apoyó la Huelga General de Galiza y Euskadi o concentraciones y manifestaciones en numerosas ciudades.

Acuerdo Social y Económico, más precariedad.
En febrero de 2001, gobierno, patronal y los sindicatos UGT y CCOO firman el Acuerdo Social y Económico, que forma parte de la política de recortes de los derechos sociales, económicos y laborales y de desmantelamiento del estado del bienestar que comenzó con el plan de ajuste del mes de mayo, tuvo su continuación con la reforma laboral y con la reforma de las pensiones.
La Confederación Intersindical valoró muy negativamente y rechazó sin paliativos el Acuerdo pues supone un recorte, sin precedentes, de las pensiones públicas y una claudicación, sin ninguna justificación, a los dictados del mercado, de la banca y del sistema financiero internacional.
El acuerdo firmado supone más precariedad para las personas que se jubilen al incrementarse la edad de jubilación a 67 años; aumentarse el periodo de cómputo de los 15 años actuales a 25; pasar de 35 años para cobrar la totalidad de la pensión a 37 años o no garantizar la revalorización automática de las pensiones.
Todas estas medidas que atacan directamente al conjunto de las trabajadoras y trabajadores, que tendrán que trabajar más años para cobrar una pensión más baja, tendrán una especial y negativa incidencia entre las mujeres, cuyas vidas laborales tienen más lagunas de cotización como consecuencia de la feminización del cuidado de familiares, y entre las personas jóvenes y las inmigrantes que se incorporan tardíamente al mercado laboral o tienen contratos temporales o a tiempo parcial.
Pero, además, las medidas contempladas sobre la incentivación de la contratación a tiempo parcial de las personas jóvenes menores de 30 años suponen acentuar la dualidad del mercado laboral y la sustitución de unas personas trabajadoras, las que tienen contrato estable y a tiempo completo, por otras en peores condiciones laborales.
Las partes firmantes han acordado la creación de un subsidio de 400 euros para las personas paradas que hayan agotado la prestación por desempleo y se comprometan a realizar actividades orientadas a su recualificación profesional. SI el anterior subsidio de 426 € era insuficiente, la Confederación Intersindical volvió a reiterar sus criticas ya que pedimos que todas las personas tengan trabajo o cobren una prestación económica digna .
Tampoco se incluyen medidas concretas para que aquellos colectivos de trabajadoras y trabajadores que han visto sus puestos de trabajo destruidos o sus salarios reducidos o congelados puedan volver a insertarse en el mercado laboral o recuperar el salario perdido.
El Acuerdo Social y Económico supone una aceptación clara y expresa de la reforma laboral aprobada por el Gobierno ya que sólo se compromete a negociar los reglamentos que la van a desarrollar. Un abandono del deber sindical de defender los derechos sociales y laborales, que sólo puede invitar a nuevas agresiones, seguidas de nuevas concesiones sindicales.
La Confederación Intersindical propuso una convocatoria de movilizaciones en todos los territorios del estado y una manifestación en Madrid de todas aquellas organizaciones sindicales, sociales y políticas que rechazan tanto el Acuerdo Social y Económico como la política de recortes y ajustes del gobierno. Todo ello para crear las condiciones que permitan la expresión de un rechazo masivo de los trabajadores y la ciudadanía a estas medidas antisociales y a las que ya se preparan en educación, sanidad y recorte del estado de las autonomías.

El movimiento 15M, Democracia real, ya.
En mayo de 2011, se inicia una movilización que nace en con las manifestaciones del 15 Mayo, a las que se suceden concentraciones y acampadas pacíficas donde la ciudadanía expresa su indignación por la forma de hacer política, manifestando la necesidad de cambiar las cosas. En diferentes localidades del territorio del estado se suceden las acampadas y cientos de miles de personas reclaman la participación el proceso de toma de decisiones, se manifiestan en contra de la corrupción, de los recortes sociales.
La Confederación Intersindical comparte con este movimiento su preocupación e indignación y valora positivamente su propósito de construir una sociedad mejor desde la base, denunciando la corrupción y la falsedad de quienes pretenden hacernos creer que las cosas no pueden ser de otra forma.
En diferentes territorios se ha participado activamente con el movimiento 15M en comisiones de trabajo y se continua en la organización de manifestaciones o actos de calle en contra de la privatización y el deterioro de los servicios públicos, contra la corrupción, por los derechos sociales. Más allá de las divergencias que podamos tener con un movimiento que se declara apolítico o anti sindicalista, la CI entiende que nuestro modelo sindical nos aleja del que el 15M critica. La lucha contra la corrupción, la búsqueda de un sociedad más justa y el rechazo a las medidas y recortes de derechos, nos acercan.

Última reforma laboral. Agosto de 2011.
El ya agonizante gobierno de Zapatero aprobó el último consejo de ministros de agosto unas medidas que van a precarizar, más todavía, el mercado laboral y que afectarán muy negativamente a las personas jóvenes, las mujeres y los inmigrantes.
La última reforma laboral que prorroga hasta los treinta años el contrato de aprendizaje y formación es toda una burla a la juventud, cuya tasa de paro es superior al 40% o trabaja con contratos muy precarios y temporales y ahora ve como esta situación se prorrogará, cuando menos, hasta los 30 años.
La nueva reforma también suspende el límite de dos años al abuso y encadenamiento de contratos temporales llevados a cabo por las empresas, la única cláusula positiva para la clase trabajadora introducida en la reforma laboral de junio de 2010. Es sintomático de la deriva del Gobierno socialista que ahora se suspenda la única medida que se salvaba de aquella reforma.

Reforma Constitucional.
En apenas semana y media, se aprobó en septiembre de 2011 una reforma constitucional para limitar el déficit público, con el apoyo del PSOE y del PP. Se trata de una medida impuesta por los gobiernos francés y alemán, por el Banco Central Europeo y por otros organismos internacionales. El gobierno español claudica ante los poderosos para acabar con las conquistas sociales que tanto sacrificio ha costado conseguir a la clase trabajadora y a los sectores sociales más desfavorecidos y supone consagrar las políticas neoliberales en la carta magna.
Además, todo esto, se hace sin tener en cuenta la voluntad popular ni convocar ninguna consulta en la que el conjunto de la ciudadanía pueda expresar su opinión. Una reforma constitucional que afectará gravemente a la ciudadanía, a sus derechos, al modelo de estado -puesto que condicionará la financiación de las comunidades autónomas y las políticas económicas y sociales- no debía haberse aprobado sin un debate en el conjunto de la sociedad ni sin que se convocara un referéndum.
Esta reforma constitucional es un paso más en la profundización de las políticas antisociales practicadas por el gobierno español, ahora con el consenso del PP, de la Patronal y de los sector financieros que ven con buenos ojos esta reforma puesto que les abre el paso a continuar haciendo negocios y a ganar dinero a expensas de los derechos sociales, de las futuras privatizaciones de los servicios públicos y del desmantelamiento del estado del bienestar.
Tanto la Confederación Intersindical como los diferentes sindicatos que la forman apoyaron la convocatoria de un referéndum para posibilitar que el conjunto de la ciudadanía pudiese expresar su opinión, apoyando y convocado todo tipo de movilizaciones, concentraciones y manifestaciones, en contra de la reforma y a favor del derecho a decidir sobre la reforma constitucional.

Nuestras tareas en una nueva etapa.
Si en 2007 marcábamos unas líneas de acción sindical, el nuevo marco que se abre a partir de 2010 hace que tengamos que ajustar determinadas tareas, cambiemos otras y tomemos nuevas iniciativas.
Se trata de ajustar nuestras actividades, tanto táctica como estratégicamente a los nuevos acontecimientos sociales. Así en 2010, como ya hemos comentado anteriormente, se abre un ataque frontal a los derechos laborales, al salario, al empleo, a los servicios públicos que , hace que, nuestra CONFEDERACION, aumente, más si cabe nuestra acción sindical , no solo en cada territorio o sectores, sino que también nuestra actividad en cuanto a acción sindical confederal .
Buscar marcos de unidad de acción, profundizar la confluencia estratégica con sectores del sindicalismo de clase y combativo, movilizar por cuestiones sociales y laborales más amplias, deben ser señas de identidad del próximo periodo, si queremos llegar a tener un perfil CONFEDERAL más reconocido de cara al exterior y más compacto de cara a nuestro interior.
Aun tiene validez y actualidad lo que decíamos en 2007:

Contra la precariedad laboral
El reparto del trabajo
Evitar la división de las personas trabajadoras
Sobre democracia y derechos sindicales
La salud laboral
El internacionalismo

Estos postulados siguen con una vigencia plena, dada la actual situación; en otros apartados
debemos ajustar y ser más precisos con la realidad que nos rodea.

La conciliación de la vida personal, familiar y laboral.
Después de cuatro años sabemos que las políticas de conciliación no han hecho sino perpetuar el rol de cuidadoras de las mujeres, acentuando la división sexual del trabajo, ya que las medidas al respecto han sido dirigidas y asumidas casi en exclusiva por las mujeres. En definitiva, la crianza y los cuidados a las criaturas o a las personas dependientes y el trabajo doméstico, siguen siendo un asunto de las mujeres. Por eso hoy no hablamos de conciliación, sino de corresponsabilidad en el reparto del trabajo doméstico y de cuidados.
Además, la maternidad sigue siendo un motivo de discriminación laboral -directa o indirecta de las mujeres. Por ello, debemos reivindicar permisos por nacimiento o adopción iguales, intransferibles y remunerados al cien por cien para madres y padres. Sólo si ambos progenitores gozan del mismo permiso los empresarios dejarán de ver en las mujeres lo que ellos consideran una fuente de problemas en forma de bajas o permisos.

Las políticas de igualdad, imprescindibles.
La supresión del Ministerio de Igualdad, del permiso de paternidad y la falta de inversión en servicios públicos como escuelas infantiles o centros de día, los recortes de los diferentes gobiernos en políticas de igualdad, no han hecho sino agravar las desigualdades en todos los ámbitos sociales. En el ámbito laboral, los prometidos planes de igualdad han quedado en papel mojado porque no se destinan recursos. Debemos exigir la implantación y desarrollo de los planes de igualdad con la dotación presupuestaría oportuna como herramienta para trabajar contra la discriminación salarial de las mujeres.
Pero también políticas que permitan a las mujeres tomar parte activa en el mundo laboral en igualdad de condiciones y que acaben con la división sexual del trabajo.

La defensa de los Servicios Públicos.
Si el comienzo de la etapa de los ataques a amplios sectores de la población, que empezaron por el recorte salarial, ya decíamos que había que defender más aun los Servicios Públicos como forma de protección de amplias capas populares, cada día más necesitadas de ellos, hoy desde gobiernos estatales , autonómicos, municipales, de diferentes partidos socialdemócratas, nacionalistas, de derechas, etc. Se ha comenzado un ataque directo sobre nuestros servicios públicos (sanidad, enseñanza, agua, transporte, servicios sociales, etc.) y cuyo objetivo no es otro que la privatización y el desmantelamiento total de ellos como servicio público universal y gratuito.
Nuestras tareas deben estar encaminadas a la defensa mas incondicional del mantenimiento de los servicios públicos, exigiendo dotaciones presupuestarias suficientes que aseguren su calidad, el aumento de las plantillas y el control de la sociedad sobre ellos, de asociaciones, sindicatos, organizaciones sociales, que vigilen y coordinen su calidad, extensión, funcionamiento etc., impidiendo que, desde el estado o cualquier poder político y/o económico, cualquier ansia privatizadora, partiendo también que lucharemos por la vuelta a manos públicas de todos esos servicios públicos ya privatizados .

La movilización social.
Afortunadamente desde hace unos meses, se empieza a romper la atonía y falta de movilización que desde hace años sufríamos, debido fundamentalmente a los compromisos de Paz Social que desde los sindicatos institucionales se ha garantizado a los diferentes gobiernos y que ha posibilitado, con semejante calma social, el aumento de los recortes y ataques sobre las personas trabajadoras y otros sectores sociales.
La aparición (más bien explosión) del movimiento de Indignados ha supuesto un aire fresco en esta situación, protagonizando las movilizaciones más participativas, numerosas y reivindicativas de los últimos tiempos, muy superiores a las clásicas movilizaciones estrictamente laborales.
Nuestra Confederación desde el comienzo ha estado apoyándolas y participando, con un ánimo abierto y de sumar fuerzas y debemos seguir alentándolas y participando con estos movimientos que han surgido, dado que solo desde la movilización social más amplia podremos parar la ofensiva que se ha abierto desde las políticas liberales actuales. Desde estas premisas, de fortalecer las movilizaciones, defenderemos la más amplia y unitaria UNIDAD de ACCION sindical y social, que vayan en la dirección de conseguir las reivindicaciones, denunciando cualquier intento de paralizarlas para firmar acuerdos de Paz Social o de recortes , como ya ha sucedido en más de una ocasión con organizaciones sindicales institucionales.
Respetaremos y alentaremos, procesos de carácter asambleario y de auto organización que con motivo de las movilizaciones y la participación masiva, se vaya dotando el movimiento en cada momento.
Ejemplos de ello se han dado claramente con el 15M, y las movilizaciones de enseñantes y trabajadores/as de la sanidad en diferentes territorios. Nuestra CONFEDERACION, a través de sus territorios y sindicatos ha demostrado que podemos participar en Plataformas amplias de sindicatos, a la vez que defendemos el carácter decisorio y auto organizativo de las asambleas, cuando desde las propias organizaciones sindicales institucionales, han intentado cambiar o menospreciar los procesos Asamblearios. Esta seña de identidad de nuestra CONFEDERACION, en procesos de movilización masiva, nos dará un perfil propio y más claro hacia quienes se movilizan en cada momento, haciendo ver que no es una posición oportunista sino que de verdad defendemos este carácter asambleario participativo.

Los movimientos sociales.
Años y años de ofensiva neoliberal sobre las conciencias, desde la televisión, la prensa , los mensajes de determinados partidos políticos institucionales, sindicatos del sistema, etc. hicieron retroceder tanto los procesos de movilización, como el estado de conciencia social de muchas personas, cayendo en el mensaje que se daba desde el poder establecido de que el sistema actual es el menos malo posible, que las medidas que se toman son un mal necesario y que no se puede cambiar nada , se haga lo que se haga, creando inactividad y derrotismo en muchas personas.
Como ya hemos dicho, esta tendencia empieza ahora a cambiar, y ya sectores de la juventud, sectores sociales más amplios e incluso personas trabajadoras se empiezan a movilizar masivamente vía Plataformas de Indignados, o contra los recortes sociales que se dan. Estos movimientos nuevos, han dinamizado también a organizaciones sociales que venían trabajando desde hace años, y se han creado nuevas plataformas reivindicativas, etc. contra proceso privatizadores (sanidad, enseñanza, agua, etc.) y también contra desahucios, por una vivienda digna, contra las tasas municipales etc., que canalizan y organizan a sectores conscientes del proceso de movilizaciones actual y cuya tendencia será a ampliarse y crecer.
Desde la CONFEDERACION debemos participar en movimientos sociales, pero siempre alentando la más amplia participación y unidad, facilitando la creación de Plataformas en defensa de los servicios Públicos o de los derechos Sociales, tal y como ya veníamos haciendo en algunos territorios, pero ahora incidiendo más en la unidad de todos estos procesos de organización, en relación a la movilización unitaria, porque solo desde la más amplia unidad de acción se podrán parar los recortes.
En este proceso y en todos los que participemos, la UNIDAD DE ACCION debe ser una de nuestras señas de identidad. No la queremos usar como otras organizaciones como un arma arrojadiza ni de denuncia ni de propaganda. Queremos qué todo el mundo sepa que para nosotros es una de nuestras señas fundamentales y que solo desde ella se pueden obtener victorias, la división o los procesos sectarios solo llevan a mas división, mas retrocesos.

Una apuesta estratégica: fortalecer un bloque sindical de clase y combativo.
Coherentes con lo que significa un ataque tan brutal, como nunca se dio, en recortes ,de derechos laborales, económicos, sociales, y del empleo, el aglutinamiento y coordinación del trabajo con otras organizaciones sindicales combativas es ya mas una necesidad que un deseo, rompiendo en la práctica con divisiones históricas y criterios sectarios que tanto han dividido al movimiento sindical alternativo.
Desde la CONFEDERACION INTERSINDICAL debemos priorizar y poner medios y propuestas concretas para que desde el sindicalismo asambleario, combativo y de clase vayamos a un marco de trabajo y colaboración estrecha, que desde el respeto a la soberanía de cada organización, si que facilite el trabajar unitariamente a favor de favorecer las movilizaciones actuales, alentar movilizaciones en el marco laboral y elaboremos propuestas y documentos públicos de las cuestiones que nos unen dando alternativas ideológicas y de salida a esta situación que las podemos elaborar unitariamente y con participación democrática. Muchas miradas de las personas trabajadoras han visto durante años división, rencillas, posiciones excluyentes y sectarias, etc. que nos han hecho dejar ver hacia fuera que no podría haber unidad contra los grandes aparatos sindicales institucionales. Hoy esta necesidad esta planteada por el grado del ataque al que no están sometiendo, por la represión que sufren muchos sindicatos alternativos en la actual situación, y también porque solo así podremos dar una visión y propuestas más concretas a lo que desde el sindicalismo institucional se propugna (las decisiones las toman las cúpulas, convocan huelgas sin contar con nadie y las desconvocan igual, firman acuerdos regresivos, etc.). Solo empezando a trabajar pacientemente la unidad del sindicalismo de clase combativo, podremos participar más ampliamente en las movilizaciones actuales y a la vez se nos vera mas unidos, mas como alternativa real.
La CONFEDERACION INTERSINDICAL aumentara sus esfuerzos en esta línea de trabajo. Ejemplos de ello, son la participación en la Red Europea de Sindicatos alternativos, o en el estado Español el haber lanzado y propulsados encuentros sindicales alternativos de cara a diferentes movilizaciones y en el que confluimos con diferentes realidades sindicales de carácter estatal, sectorial y territorial de claras señas de clase y alternativos.
Y también debemos decirlo claro, porque ya nuestro anterior congreso así lo pusimos como lema, el FUTURO NECESARIO, plantearemos a aquellas organizaciones que puedan estar más cerca de nuestros postulados que sigue de actualidad más necesaria aun que en 2007, el crecimiento de nuestra CONFEDERACION , el seguir sumando fuerzas organizativas a este proyecto y que de forma paciente, abierta, flexible, tanto en nosotros como en esas organizaciones cercanas a nosotros, pueden formar parte de una organización que sumando fuerzas, ganara en número, pero que sobretodo esa suma hará ganar en expectativas y proyecto estratégico , apareciendo como una fuerza sindical que se define democrática, asamblearia, de clase, y diciendo bien alto, que también somos alternativa al actual sindicalismo institucional y burocrático existente en otras organizaciones Confederales.

A modo de reflexión.
En la acción sindical, fundamentalmente va a marcar nuestra agenda de actividades el grado de movilización social que se produzca en cada momento, y el grado de conciencia social, para que esta sea lo más pegada a la realidad posible.
Nuestros planes no son cerrados, ni teóricos, ni tiene numeración y fechas, ni siquiera ordenación.
Pero deben pasar por:

- Impulsar las movilizaciones sociales, unitarias y con carácter amplio.
- Apoyar procesos asamblearios y progresistas de auto organización que se produzcan
durante las movilizaciones.
- Participar en Plataformas en defensa de los servicios Públicos u otras de carácter social y
reivindicativo.
- Construir marcos de trabajo y coordinación con el sindicalismo de clase y combativo

Son líneas de trabajo en las que nuestra Confederación debe enfocar su acción sindical y que si aparecemos claramente como el proyecto que aun estamos construyendo y con un carácter abierto, podremos ser un polo de referencia real ante trabajadores y trabajadoras, y ante otras organizaciones sindicales que se acerquen a nosotros, para hacerlo crecer entre todas y todos.

 

Ponencia de Trabajo Internacional

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Sindicalismo e internacionalismo.
Una experiencia, algunos problemas y varias líneas de acción

En los últimos años hemos sido testigos de cómo la globalización neoliberal está obligando a los sindicatos a dar más importancia a la dimensión internacional de su acción sindical.
No obstante, este empeño está todavía limitado por la poca capacidad de acción internacional efectiva que los sindicatos poseen, lo cual pone también en primer plano la necesidad de avanzar en articular nuevas formas de solidaridad internacional como elemento clave para revertir los procesos de erosión de los derechos laborales, sociales y económicos en el marco de la globalización neoliberal. Fomentar el debate y las discusiones entre las organizaciones sindicales de diferentes países es pues tarea fundamental.
Los nuevos frentes de contestación social frente a la globalización generan un contexto potencialmente favorable para la renovación y revitalización de los sindicatos y para encontrar nuevas vías de salida a la crisis buscando alianzas con otros movimientos y sectores sociales hoy alejados del sindicalismo.
No consideramos que la globalización haya cambiado la naturaleza del sindicalismo, pero sí creemos que ha incorporado nuevos elementos en la acción sindical nacional, estatal y supranacional. Movimientos de capitales, de personas, de mercancías, deslocalizaciones etc. los ha habido siempre, pero el ámbito en el que se producían no es el mismo que el actual. Estas trasferencias empresariales han generado siempre intereses contradictorios entre los trabajadores de los distintos polos del proceso. Porque en algunos casos los trabajadores participan parcialmente de los beneficios que el orden global de dominación asegura a los países centrales aunque la caracterización de la crisis está generando un cierto chauvinismo, e incluso algunos brotes de racismo entre trabajadores autóctonos y extranjeros. Esto es parte de la ideología dominante de nuestras sociedades y difícilmente podría serle indiferente a la clase trabajadora contemporánea, inmersa en la sociedad de consumo y la cultura de masas.
El problema ha consistido, y consiste, en cómo trabajadores de distintos países construyen una agenda común de reivindicaciones y acción sindical. Ésta no es sino una dimensión de un problema estructural de la acción sindical: cómo construir un colectivo político-sindical. Porque toda la historia del movimiento sindical es la historia de cómo segmentos específicos de trabajadores, por sobre sus diferencias, construyen y dan vida a proyectos comunes. Las diferencias que se originan de las divisiones de la clase trabajadora en países y naciones con lenguas, leyes, instituciones y culturas diferentes probablemente sean las más difíciles de superar. Nunca la realidad internacional de la clase trabajadora fue tan patente como ahora y probablemente nunca la necesidad de una acción sindical internacional fue tan aguda como en la actualidad.
El objetivo del presente texto es tratar, a partir de la experiencia de la Confederación Intersindical, cuáles son los intereses comunes entorno a los que construir en nuevo "internacionalismo" sindical.

La experiencia de la Confederación Intersindical.

A-En el ámbito de STEs-Intersindical.
A STEs-I, pertenece un grupo de profesionales responsables de uno de los trabajos más difíciles del mundo: facilitar a los niños y niñas y jóvenes el empleo de todas sus dotes en el trayecto individual y colectivo de sus vidas. El profesorado es un elemento clave para impulsar, favorecer, desarrollar y motivar a los niños, niñas y jóvenes en su búsqueda de conocimientos , estrategias en su aprendizaje continuo y convivencial.
Pensamos que el derecho a la educación pública, gratuita y de calidad debe regir nuestro trabajo internacional. Es desde este punto de vista que la confederación censura los modelos elaborados por el Banco Mundial, la OCDE y el FMI para alcanzar el objetivo de educación para todos y todas. Las instituciones multinacionales conceden créditos al sector de la educación de los países empobrecidos y de esta manera las instituciones financieras acaban siendo los entes rectores de las reformas educativas en los países y de los modelos de financiación del sector social. Con frecuencia, las exigencias de que se reduzcan los presupuestos públicos socavan el objetivo de una mejor educación en los países empobrecidos. Muchos profesores y profesoras son contratados por períodos cortos; muchos países reducen sus requisitos en la formación de profesorado y, en general, los salarios de los educadores son muy bajos. Se ha despedido a profesores cualificados con el argumento de que son demasiado caros, y se les ha reemplazado con mano de obra no cualificada, en calidad de " profesores voluntarios". En situaciones como esas, los sindicatos pueden hacer que las cosas sean diferentes.
Mención especial, deberíamos hacer aquí a toda la situación por la estamos atravesando en Europa principalmente los compañeros y compañeras de Grecia, Irlanda, Portugal y en nuestro caso, en el Estado Español.
Muchos sindicatos encontramos obstáculos para el diálogo con el Gobierno. La negociación sindical se ha visto relegada a mera información. En algunos países, los sindicatos están proscritos, en otros, las autoridades obstaculizan el quehacer sindical y se menoscaba la democracia. Durante muchos años, el Sindicato ha desarrollado actividades de solidaridad amplias y extensas. Desde hace más de 16 años la Confederación, a través del STEs-I ha colaborado con organizaciones principalmente de América Latina, Europa y África. El objetivo primordial siempre ha sido ayudar a fortalecer las organizaciones del profesorado y coadyuvar al movimiento sindical del profesorado nacional, estatal e internacionalmente. Para lograr este objetivo, necesitamos sindicatos fuertes y dinámicos en el sector de la educación.
Otra tarea importante es recuperar, en el sector de la educación, la función ideológica que tenía la enseñanza, que nos la van cambiando hacia una función más económica y la ideológica ha quedado en manos de los medios de comunicación y la publicidad. Esto se puede comprobar en las recientes competencias básicas que debe enseñar la escuela, sólo se está pensando en obtener un producto, el alumnado instruido, para que pueda dar el rendimiento necesario para las empresas. Cuando se habla de introducir la técnica y la tecnología en el entramado educativo, solamente se piensa en obtener personas cualificadas para un sistema que reproduce la desigualdad social y salarial, pero no se puede perder de vista el hecho de que la escuela tiene que dar una formación integral, que tiene que formar ciudadanos, que además de ser personas cualificadas para desempeñar un empleo, sean también ciudadanos capacitados para convivir y para modificar la forma de funcionar de los gobiernos de tal manera que se pueda conseguir un mundo donde existan menos injusticias, y que tienda a conseguir la igualdad y la equidad social. De esta manera la escuela contribuirá a la democratización de nuestras sociedades.
Desde hace unos años, el debate sobre la educación se ha internacionalizado. En grandes foros y conferencias se establecen y definen criterios unificados sobre objetivos educativos necesarios y deseables. Por este motivo debemos involucrarnos en los entornos donde se debatan y diseñen las políticas educativas, mediante la participación activa en los foros sindicales internacionales y en la cooperación práctica con las organizaciones de educadores del Sur. Debemos contribuir a que los sindicatos de todos los continentes se conviertan en actores destacados en las políticas educativas de sus propios países.
En los países llamados ricos tenemos la posibilidad de participar en este debate e influir en él y teóricamente decidimos con autonomía si nos sumamos o no a las propuesta de cada momento. Los países empobrecidos dependen de las grandes instituciones financieras y de los diferentes donantes. Estos establecen las directrices generales, fijan las condiciones de la ejecución, y fiscalizan. Los países empobrecidos actúan, en principio como ejecutores de resoluciones dictadas por actores externos. Se les impone condiciones que no necesariamente se prestan al diseño de una política educacional integral. (Recordemos que, actualmente, empieza a pasar en una serie de países europeos entre los cuales nos incluimos).
La acción en el campo político-educativo es, para nosotros, consecuencia lógica del mandato sindical que exige proteger los intereses de la afiliación e influir en el desarrollo de la política educativa. Es por esto que la Confederación debe familiarizase con las tendencias internacionales que influyen en el sistema educativo español, participando de él y contribuyendo al debate internacional. Las actividades internacionales de la organización se necesitan para poder enfrentar los desafíos y problemas de las políticas educativas en el ámbito nacional y estatal. Mediante la participación activa y la integración de comisiones podemos aportar nuestra competencia, experiencia e ideas. La Confederación debe considerar que su presencia en los foros donde se forjan las políticas es vital para influir en las autoridades encargadas de tomar decisiones en el plano nacional, estatal e internacional. Las políticas educativas internacionales deben formar parte de la formación básica en nuestra organización.
Para poder mantener esta amplia competencia, es menester que la Confederación tenga acceso a información procedente de campos en que organizaciones homólogas de otras latitudes tienen más experiencia, como, por ejemplo, la privatización del sector educativo, las pruebas comparativas de los estudiantes, y el nuevo modelo de gestión pública denominado New Public Management. Es importante que la Confederación utilice esas experiencias al formular sus propias políticas. En todo el mundo, los compañeros y compañeras de otros sindicatos encaran desafíos similares a los nuestros. La cooperación más allá de nuestras fronteras fomenta la solidaridad y es una necesidad vital para cualquier sindicato. Mediante la cooperación profesional y económica con sindicatos que en determinado período lo necesiten, por ejemplo, nuestra Confederación tiene la posibilidad de compartir y aprovechar las experiencias de la organización contraparte; eso nos hace más fuertes para enfrentar el impacto de la globalización.
Nuestra estrategia para el trabajo internacional se ha orientado y debe continuar orientándose hacia la labor profesional del profesorado para coadyuvar a una educación de calidad para todos y todas, y hacia la protección de los derechos sindicales del profesorado. Con las actividades internacionales de la Confederación procuramos aumentar el compromiso y la reflexión de los delegados y delegadas sindicales y de la afiliación, ya que las entidades internacionales influyen cada vez más en los sistemas educativos nacionales y estatales. Las pruebas, evaluaciones y políticas educativas internacionales determinan el alcance de los deberes del profesorado del Estado español. Tanto las evaluaciones profesionales del profesorado como sus derechos sindicales son influenciados por las nuevas tendencias
internacionales.
El compromiso internacional debe basarse, además, en las políticas y estrategias de la Internacional de la Educación (IE), en otras organizaciones sindicales de ámbito supranacional como la CEA y de otros ámbitos más reducidos, bien sea a nivel europeo o latinoamericano que es, por ahora, en el ámbito en que hemos ido relacionándonos. La proyección hacia América Latina es algo natural, luego de nuestras relaciones con las organizaciones europeas, debido a la comunidad lingüística y la tradicional relación entre latinoamericana y España.
La Confederación participa en espacios alternativos al pensamiento neoliberal dominante como el Foro Mundial de Educación( FME) y el Foro Social Mundial(FSM) ,en ámbitos sindicales (como la IE) y tiene relaciones con otras organizaciones de trabajadores y trabajadoras de la educación (como la Confederación de Educadores Americanos, (CEA) y la regional latinoamericana de la Internacional de la Educación) y con organizaciones del Sur de Europa, América, y en menor medida de África . En algunos de estos espacios las coincidencias políticas son mayores y consecuentemente son también mayores las posibilidades de acción conjunta, mientras que en otros casos, como en la IE, éstas son más limitadas.

B-La experiencia internacional intersindical.
La acción internacional que hemos desarrollado trasciende tanto el ámbito específicamente educativo como el específicamente sindical. La Confederación Intersindical mantiene contactos, aunque incipientes por su reciente constitución, en varios ámbitos internacionales, como la Red Europea de Sindicatos Alternativos y de Base, que integra sindicatos combativos del continente. También ha participado en las diversas convocatorias del Foro Social Europeo y en varias redes internacionales de carácter general o sectorial. Ha apostado para mantener contactos en el ámbito internacional en varios asuntos. Ha participado en la creación de la Red Mundial por los Derechos Colectivos de los Pueblos y en las actividades que ha organizado desde su creación, entre las cuales hay que destacar la presencia en el FSM de Dakar a través de la Intersindical Valenciana y STEI-i. También apostamos por la participación de la Confederación en la Red Sindical Euromediterránea y durante dos años consecutivos hemos participado en la Conferencia Internacional de Solidaridad con el Pueblo Saharaui y hemos formado parte en Enero del 2011 de la Misión Sindical Internacional al Aaiún, lo que nos ha permitido mostrar una vez más nuestra solidaridad y estrechar relaciones con UGTSARIOS, con quienes se mantuvieron encuentros en los Campamentos de Refugiados en Tinduf. Continuaremos con esta línea de colaboración y acercamiento con UGTSARIOS y con otras organizaciones como la Confederación Sindical de Trabajadores Saharauis y defensoras de los derechos humanos en el Sahara Occidental como la ASVDH y de participación en las Conferencias Internacionales de solidaridad . Las relaciones con los sindicatos y movimientos sociales latinoamericanos son desde hace tiempo, una parte esencial de nuestra proyección internacional, por ello se procurará seguir fomentando proyectos de colaboración y de coparticipación .Un ejemplo de ello es nuestra presencia en la Secretaría Ejecutiva del Consejo Internacional del FME. La Confederación Intersindical debería dotarse de una estructura internacional mínima como espacio de confluencia intersectorial dado que el peso de internacional hasta ahora recae en Educación. Con una adecuada planificación la asistencia a diversos foros internacionalescomo los foros Sociales Mundiales, europeos y otros-podría propiciar un reconocimiento más intersindical.
Recapitulando. Para alcanzar los objetivos de una sanidad, educación, servicios públicos, sociales…, de calidad para todos y todas, y condiciones salariales y laborales justas es preciso que los sindicatos de todo el mundo interactúen y compartan sus experiencias. Muchos de los asuntos que nos afectan como trabajadoras y trabajadores en general y, como personas vinculadas laboralmente a los servicios públicos-educación, sanidad, administraciones locales, autonómicas, justicia, ferrocarril ….-tienen que ver con las políticas diseñadas por los organismos internacionales. Junto con otros sindicatos, luchamos para que los trabajadores y trabajadoras sean actores importantes al modelar las políticas educativas en el plano nacional, estatal e internacional. Se trata de actuar internacionalmente para favorecer los procesos de lucha, movilización, reflexión y elaboración de alternativas que posibiliten hacer frente a las políticas aprobadas por organismos como el FMI, la OMC ,BM o la UE.

Los problemas del internacionalismo sindical.
Los sindicatos tienen que buscar, también en el plano internacional, una mayor relación con los movimientos sociales en general y, en particular, con las iniciativas del movimiento "antiglobalización". Para lo cual tienen que superar la limitación de la acción sindical ligada al trabajo productivo además deben defender también las reivindicaciones que afectan al campo de la reproducción social, implicándose en la lucha en defensa de los derechos nacionales, del medio ambiente, los derechos humanos, servicios públicos y otros derechos sociales así como una verdadera democracia participativa.
Del sindicalismo del Sur nos llegan en general sus frecuentes y justificadas denuncias de las depredadoras multinacionales, de los gobiernos locales que las amparan y de los gobiernos de los países donde tienen casa matriz, que las defienden y promueven. Estas denuncias enfatizan las frecuentes violaciones de los derechos básicos de los trabajadores y trabajadoras, del reiterado incumplimiento de los Convenios de la OIT. Denuncias que llegan como un grito repetido, formulado también en las reuniones, conferencias, congresos…Esto es correcto, y debe ser el punto de partida de la relación entre sindicatos que se proponen actuar internacionalmente. Pero no puede ser el elemento esencial ni permanente en una relación orientada a apuntar líneas de acción, de coordinación, de solidaridad, de indudable interés para el sindicalismo del Sur y del Norte, cada uno desde su propia perspectiva y desde sus propios intereses. El punto es, justamente, la construcción, legitimación y promoción de acciones derivadas de una agenda común de trabajo entre actores sindicales de diferentes países.
La ausencia de instrumentos de gobernanza global auténticamente democrática a escala planetaria, baste recordar la actitud actual de los gobiernos europeos ante la crisis, G- 8,G-20,debe hacernos pensar que organizaciones como OMC, FMI, Banco Mundial, Consejo de Europa, ONU ,OTAN etc., toman decisiones y marcan normas imperativas a nivel mundial, por lo general desfavorables para las mayorías sociales que aspiramos a representar. Por el contrario el sindicalismo no cuenta con normas eficaces en relación con los derechos del trabajo, ya que ninguna institución tiene fuerza para imponer los Convenios de la OIT. En este sentido, es urgente avanzar en la construcción de un sindicalismo global, mundial, con capacidad de decisión y de compromiso, capaz de negociar en el ámbito mundial. Esto exige estructuras sindicales supranacionales con capacidad y voluntad para ejercer el liderazgo, apoyándose en los sindicatos más fuertes pero sabiendo distanciarse de los intereses más concretos de los más fuertes, y sin paternalismo hacia los más débiles. Todos somos necesarios, no queramos ser hegemónicos, y como decía el lema del XIX Congreso de la CEA "Construyamos la unidad desde la diversidad, comprometidos con una educación al servicio de nuestros pueblos".
Pero la necesidad, clara tal vez para todos nosotros, de coordinar nuestras acciones con los movimientos anti-globalización, de lograr niveles más profundos de articulación con las organizaciones sindicales de los países del Sur y de construir un poderoso movimiento sindical internacional no debe hacernos negar las dificultades del movimiento sindical para actuar internacionalmente. Estas dificultades se agudizan cuando se trata de organizar acciones colectivas y no simplemente reuniones, seminarios y congresos. Y son cada vez más graves, porque la capacidad de acción internacional de los gobiernos y el capital ha crecido exponencialmente; y tienen relativamente menos justificación, porque el desarrollo de internet permite condiciones que no existían décadas atrás para la coordinación entre activistas y líderes sindicales de diferentes países.
La excesiva institucionalización de las organizaciones sindicales internacionales y el monopolio de la representación sobre la clase trabajadora que las organizaciones hegemónicas pretenden ejercer agravan el problema. Veamos ambos puntos.
La excesiva institucionalización de las organizaciones sindicales internacionales lleva a que sea marginada la principal herramienta de los asalariados: la acción colectiva. Este no es un argumento ideológico o teórico: la acción directa es la principal herramienta de los trabajadores porque, en la historia del capitalismo, es la que posibilitó las mayores transformaciones en la sociedad capitalista. Si sectores de la clase trabajadora tienen condiciones de vida más justas que 100 o 150 años atrás es porque, en determinados contextos históricos, la acción directa real o potencial de la clase trabajadora forzó a transformaciones relativamente profundas en sociedades inherentemente injustas como las capitalistas (1). No significa que la acción directa lleve al triunfo, ni que deba ser la única medida de presión, ni siquiera que sea siempre recomendable. Significa que la acción directa debe ser mantenida, legitimada, porque no se abre un nuevo horizonte para la clase trabajadora sin acción directa. El horizonte de la pérdida progresiva de derechos, este año o el siguiente según la capacidad y la fortuna, es el muro sobre el que se estrella el posibilismo como política y el lobby en las oficinas gubernamentales como único método de acción sindical. El movimiento sindical debe combinar tanto en el plano estatal como internacional la capacidad de negociación y de movilización.

(1) Todo el sistema de bienestar social de los principales países de Europa no se entiende sin la fuerza y la amenaza que representaban la clase trabajadora, el sindicalismo y el socialismo- comunismo en la posguerra, y la progresiva destrucción del mismo estado de bienestar no se entiende sin el retroceso de la clase trabajadora, del sindicalismo y de las ideologías de izquierda . La marginación de la acción directa como herramienta es parte de este retroceso.

Que las organizaciones hegemónicas pretendan ser las únicas representantes de los trabajadores disminuye la capacidad de la clase trabajadora de dar respuesta ante la situación política. Naturalmente, que haya grandes organizaciones sindicales internacionales es un avance para los trabajadores. Pero también lo es que haya distintas instancias legítimas de organización internacional, porque, lejos de ser un problema, permite que se exprese la pluralidad política que existe en la base del movimiento sindical. Centrar las discusiones en torno de la unidad o la pluralidad sindical lleva a poner un énfasis exagerado en las cuestiones organizacionales, cuando los principales problemas son políticos: ¿cómo hacen los trabajadores y sus organizaciones representativas para que el capitalismo no se recomponga por la vía de medidas económicas conservadoras?, ¿Cómo contribuyen los sindicatos europeos (donde la tasa de desempleo alcanza a 23 millones (9,9%) de la población activa, de los que 15 millones corresponden a la zona euro y 4,9 (21,5%) al Estado español) para que en el sudeste asiático (donde el capitalismo y el trabajo ha crecido) se forme un poderoso movimiento sindical autónomo? (autónomo, también, del sindicalismo europeo)?, ¿Cómo el sindicalismo de Estados Unidos y muchos países de Europa sale de la combinación entre una poca capacidad de acción colectiva y una perspectiva política posibilista en la que parece debatirse?
Pienso que, aunque no debería de ser así, los sindicatos dividen sus actividades en dos partes: las actividades sindicales internacionales y la labor de solidaridad.
Además el internacionalismo coloca, en una nueva dimensión, un viejo problema: la construcción de frentes únicos y las dificultades programáticas que éstos envuelven. Por ejemplo: los sindicatos del Estado español que pertenecen a la Internacional de la Educación no tienen siempre objetivos comunes, porque tenemos el caso de CCOO, UGT, CSIF, USO,CIG,ELA-STV y STEs-I, que marcan políticas a veces no solo diferentes, sino incluso antagónicas. Por ejemplo, en el caso de la evaluación docente se tendrían que marcar líneas globales: cómo se tiene que evaluar, quién tiene que evaluar, qué se debe evaluar y se debería llegar a un acuerdo para trabajar todos en el mismo sentido. En el tema de los presupuestos que se tendrían que dedicar al sector educativo, se debería hacer lo mismo. Los alineamientos tendrían que seguir este camino.
El objetivo que late en esta ponencia es la necesidad de que el sindicalismo actúe al unísono en cualquier sector. Pensemos por un momento en el hecho que cuando cualquiera de las transnacionales Repsol, Telefónica o Nike tiene que negociar con sus trabajadores un convenio, si todos los sindicatos de todo el mundo estuviesen unidos a la hora de marcar las directrices del convenio y todos fuesen solidarios, pensemos en la inmensa fuerza que tendrían. Lastimosamente hoy muchos sindicatos funcionan como si tuviesen que sacar adelante una serie de proyectos, como si fuesen una Organización No Gubernamental de Desarrollo (ONGD), pero resultamos incapaces de ponernos de acuerdo con los sindicatos de los países empobrecidos.
Los problemas del internacionalismo sindical tal cual lo entendemos son justamente problemas porque superarlos es estratégico para nuestra acción, y al mismo tiempo porque es difícil hacerlo. Éstos tienen naturaleza política y organizativa y son básicamente dos:

- ¿Cómo hacer para que las relaciones entre organizaciones sindicales de distintos países sean más directas y profundas? ¿Cómo educar en el internacionalismo a las propias organizaciones sindicales a sus militantes, activistas y cuadros sindicales?
- ¿Cómo construir colectivos mayores, más representativos y con mayor capacidad de incidencia para defender una educación, sanidad, servicios públicos en general concebidos como derechos ciudadanos que forman parte del proyecto internacionalista de construir una sociedad más justa, cohesionada y solidaria?

Para hacer frente a estos problemas, ¿cuáles son los alineamientos convenientes?

Sobre las relaciones entre organizaciones sindicales de distintos países y la formación sindical.

- Los sindicatos de diferentes países deben compartir la misma agenda a través de sus Internacionales u otras organizaciones supranacionales y a través de foros tanto virtuales como presenciales de interrelación. Esto es parte de una política que debe tender a la unión mundial de sindicatos, que deben avanzar en la construcción de objetivos por sectores y objetivos comunes globales en el ámbito mundial para hacer frente a los intentos de debilitamiento y desaparición que han puesto los organismos internacionales al servicio estratégico del capitalismo financiero.
- Nuestra Confederación debe luchar activamente contra la desigualdad de género, el feminicidio, el analfabetismo —tanto en su sentido estricto como funcional-,contra la explotación sexual de mujeres y menores y contra la homofobia….
- Tenemos que destinar personas y recursos económicos en nuestros presupuestos a la acción internacional. Sin personas y sin recursos será imposible lograr que las relaciones internacionales tengan continuidad y que se mantengan con fluidez con intercambios de información, publicaciones, asistencia a los encuentros y foros. Es en este contexto que la comunicación aprovechando las nuevas tecnologías debe ser potenciada y que debemos trascender las llamadas coyunturales de solidaridad internacional para avanzar en relaciones estables y sólidas que permitan acompañar los conflictos laborales más allá de su manifestación explosiva en la prensa.
- También tenemos que trabajar para crear y fortalecer nuestras relaciones internacionales bilaterales o multilaterales con sindicatos y entidades de todo el mundo, tanto de los países de nuestro entorno más cercano como Europa y los países del Mediterráneo como de los más alejados geográficamente como son los de América o Asia. Tenemos que dedicar una especial atención a las relaciones con las organizaciones de las naciones sin estado o con lengua propia como por ejemplo las organizaciones kurdas, palestinas o saharauis.
- Es necesario que nuestra Confederación acepte que toda actividad solidaria de cualquier sindicato miembro de ella, deben ser consideradas como actividades propias.

Sobre la construcción de colectivos con capacidad de incidencia y el compromiso con la construcción de una sociedad más justa.

- Es menester reavivar la línea de la reivindicación, de la salida a las calles a manifestarse contra las injusticias y denunciar a los gobiernos y a los empresarios que explotan a los trabajadores y trabajadoras. No hay construcción de colectivos militantes ni se abren nuevos horizontes a la acción sindical sin acción colectiva, sin movilizaciones, actos y manifestaciones.
- Los sindicatos de trabajadores y trabajadoras de la educación tienen la imperiosa necesidad de movilizar al resto de elementos que pertenecen a la comunidad educativa, como son las familias, los alumnos y las alumnas, las asociaciones de padres y madres, el personal de limpieza, de cocina, de mantenimiento, etc. Los trabajadores y trabajadoras de la educación tenemos condiciones relativamente favorables para hacer esto a partir de la defensa del sector público que, lejos de ser una consigna corporativa, es también defender su transformación democrática y su mejora permanente.
Además de ser una definición programática, la defensa de la educación pública permite enmarcar las demandas más corporativas en otras más amplias (por ejemplo, la defensa de la educación como un derecho y no como un servicio). Esto ayudará a contrarrestar las críticas habituales del BM y otros agentes neoliberales y generar simpatías entre la opinión pública y alianzas estratégicas con otros movimientos sociales o grupos progresistas.
- La lucha se tiene que organizar, a la vez, en múltiples escalas, desde la global a la local, intentando que en las diferentes escalas esté articulada, coordinada y pretenda conseguir objetivos comunes. Por ejemplo, ante las luchas aparentemente globales, como las luchas contra la AGCS de la OMC, no es suficiente protestar ante las puertas de la OMC. Los que toman muchas de las decisiones en la OMC son los ministerios de comercio de los diferentes países, por tanto, la lucha también se tiene que llevar a término a escala estatal. Para trabajar a diferentes escalas, tenemos que estar al tanto de nuevas amenazas y agresiones globales que cambian constantemente y antes las cuales es muy difícil articular una respuesta adecuada con la celeridad necesaria (2).
- Además de nuestra acción en el marco de organizaciones institucionalizadas y muchas veces bastante representativas, debemos subrayar la necesidad de llevar adelante campañas, con ejes claros, que signifiquen acciones internacionales coordinadas.

(2) Por ejemplo, la Fast Track Initiative, gestionada por el Banco Mundial para la consecución de los objetivos de Educación para Todos, propone que los países que quieran recibir financiación en el marco de esta iniciativa no pueden pagar a los maestros un salario superior al de un determinado punto de referencia. Se trata de medidas globales que afectan directamente a los trabajadores y a las trabajadoras de la educación de los países que aún son poco visibles. Es necesaria la búsqueda comprometida para desenmascarar estos mecanismos de influencia global tan negativos y para articular una respuesta rápida y contundente.

Esta línea de acción debe permitirnos presionar e incidir en el sentido que consideramos correcto dentro de organizaciones con definiciones políticas ambiguas, como la IE, aunque sus pronunciamientos derivados de su último Congreso Mundial celebrado en julio de 2011 en Ciudad del Cabo avanza en una línea formalmente más próxima a nuestros postulados. Éste es el norte con que debemos actuar dentro de los grupos de trabajo y de gobierno de la IE. Nuestro fortalecimiento e incidencia en el plano internacional no se puede basar en aspectos burocráticos y económicos-no disponemos de tales recursos-sino que en ir tejiendo alianzas con las organizaciones con las cuales exista mayor afinidad ideológica para ir generando de forma lenta pero efectiva en la agenda de la acción sindical internacional políticas de rechazo no meramente declarativo contra las actuales políticas neoliberales.
De este modo, marcaremos objetivos comunes generales y específicos con entidades de otros países y politizaremos en la medida de nuestras posibilidades las relaciones internacionales en esta orientación.. No se abren nuevos caminos para el movimiento sindical sin debate político y, en el caso de la educación, la sanidad y los servicios públicos en general sin mostrar y discutir cómo tras las medidas "técnicas" y las propuestas "economicistas" hay un proyecto de sociedad. Las medidas técnicas y las propuestas que propugnamos tienen que ser explícitamente solidarias y enfocadas en la construcción de una sociedad más justa, equitativa, cohesionada y sostenible y debemos actuar unidos con todos aquellos dispuestos a transitar la misma senda.

A modo de epílogo algunas observaciones, propuestas y consideraciones.
1-Los órganos confederales deberían definir las líneas generales de nuestra política de relaciones internacionales sirviendo esta ponencia de marco genérico para dicho debate y toma de decisiones.
2-Dotarnos de una estructura para el área de internacional que garantice tanto la toma de decisiones ágiles por su urgencia: comunicados de solidaridad, de prensa, de intercambio con organizaciones ,foros y sindicatos de ámbito internacional como en la elaboración de documentos y propuestas más elaboradas a corto, medio y largo plazo.
3-En el plano organizativo-financiero específico:

- Actualizar-o realizar ,si es el caso-nuestra base de datos de contactos y relaciones internacionales para que las responsabilidades asignadas a personas se conviertan en institucionales.
- La confección de un presupuesto para el área de Internacional es condición necesaria aunque no suficiente para garantizar la asunción de nuestros objetivos básicos internacionales; hay que tener presente que actuaciones autofinanciadas por sindicatos confederales han coadyuvado o en algunos casos han abierto caminos de conocimiento y reconocimiento internacional; hay que tener presente también la proyección internacional que se desprende de otras áreas confederales.

4-Finalmente resulta muy complejo realizar una previsión planificada de actuaciones, incluso priorizando y siendo muy selectivos y austeros en la elección de nuestra presencia internacional. La propia dinámica de actuación internacional retroalimenta la mayor demanda de participación en encuentros, foros, congresos, reuniones ,grupos de trabajo…etc. con el consiguiente incremento de necesidades económicas y de personas para atenderlas.